El terrorismo yihadista vuelve a golpear a España

DPA

ESPAÑA

JOSEP LAGO | AFP

En 2016 las amenazas del EI y otros grupos yihadistas se duplicaron, con «menciones constantes a toda España» e incluso «llamamientos expresos»

17 ago 2017 . Actualizado a las 21:23 h.

La larga historia del terrorismo en España inauguró un nuevo capítulo. Barcelona sufrió este jueves un atropello masivo como los perpetrados los últimos meses por yihadistas en otras ciudades europeas. El ataque con varios muertos en La Rambla, la calle más turística de la ciudad, acaba así dolorosamente con una excepción: España era uno de los últimos grandes países europeos que venía evitando ser víctima de la nueva ola de ataques islasmistas tras los cometidos en Berlín, Londres, París, Estocolmo o Niza.

«Los cobardes asesinos pretenden someternos por el terror, acabar con nuestra democracia, con nuestra concordia labrada durante años de pacífica convivencia», había advertido el ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, tras el atentado islamista contra un concierto en Mánchester a fines de mayo.

Zoido confirmó entonces que España mantenía el nivel de alerta antiterrorista 4 de 5. El Gobierno lo situó en ese nivel -que implica un riesgo alto de amenaza de atentado- en junio de 2015 tras los atentados de Francia, Túnez y Kuwait. Pero la amenaza del terrorismo está lejos de ser una novedad en España.

La historia moderna del país lo conoce de cerca, aunque bajo otra etiqueta. La nueva oleada yihadista que viene golpeando en grandes ciudades europeas atacó este jueves a España. Las señales recientes eran alarmantes: el informe oficial sobre terrorismo publicado en junio indicaba que las amenazas de Estado Islámico (EI) y otros grupos yihadistas a España se duplicaron en 2016.

«Las menciones a España fueron constantes a lo largo de todo el año. Algunas veces se efectuaron mediante amenazas directas, con llamamientos expresos a atentar contra España y contra sus ciudadanos; otras veces se hizo referencia mediante imágenes o expresiones que también podían entenderse como amenazadoras», indicaba el informe.

Buena parte de las amenazas aludían a Al-Andalus, el nombre que explica por qué España es un objetivo central del islamismo. Al-Andalus fue el territorio bajo dominio islámico en la península Ibérica desde 711 hasta la expulsión de los musulmanes de Granada en 1492. «Reconquistarlo» es un eje del imaginario terrorista.

Junto con las amenazas, aumentaron las detenciones. Desde que España aumentó a 4 el nivel de alerta en 2015, las fuerzas de seguridad detuvieron a más de 180 presuntos terroristas yihadistas. Los últimos meses se sucedieron noticias de capturas en diversos puntos del país, lo que se reflejó en otro dato: el terrorismo pasó a ubicarse entre las tres principales preocupaciones de los españoles.

Las diez explosiones provocadas el 11 de marzo del 2004 llevadas a cabo por una célula terrorista de tipo yihadista, convirtieron este ataque en el mayor atentado cometido en Europa después del de Lockerbie en 1988. En aquel 11-M, Al Qaeda mató a 192 personas detonando bombas en varios trenes suburbanos de Madrid.