Regresan 90 policías coruñeses que estuvieron desplegados en Barcelona durante 53 días

Xosé Vázquez Gago
Xosé Gago A CORUÑA / LA VOZ

ESPAÑA

CESAR QUIAN

Los agentes pasarán una semana en sus hogares antes de reincorporarse al operativo en Cataluña. Mientras, el barco de Piolín dejará Barcelona en los próximos días

14 nov 2017 . Actualizado a las 09:32 h.

Cerca de 90 agentes de la Policía Nacional que tienen su destino en A Coruña pudieron regresar el lunes a su hogar desde Barcelona, donde fueron enviados como refuerzo para la celebración del referendo ilegal del pasado 1 de octubre. Los policías podrán pasar una semana de descanso después de 53 días ininterrumpidos en la capital catalana, en la que fueron desplegados el pasado 21 de septiembre.

La mayor parte de los agentes de la expedición llegaron a la comisaría coruñesa de Lonzas pasadas las 19.20 horas. Fueron recibidos por una pequeña comitiva, integrada por varios compañeros y miembros del Sindicato Unificado de Policía (SUP), el mayoritario en este cuerpo.

Desde al entidad destacaron que durante esta semana los policías «podrán hacer la vida diaria que desarrolla cualquier ciudadano de este país tras finalizar su vida laboral». No fue así durante casi dos meses en los que tuvieron que pernoctar en cruceros atracados en el puerto barcelonés, en camarotes de dimensiones «muy reducidas», según el SUP. Las críticas se hicieron extensivas también a la «baja calidad» de la comida, compuesta casi en exclusiva de «arroz y pasta, a diario».

Mejores condiciones

En el SUP consideran inverosímil que no se les facilitasen mejores condiciones de vida, una vez que se comprobó que la crisis política desencadenada por el referendo ilegal se prolongaría.

A esas dificultades se suma la hostilidad de los partidos secesionistas, sobre todo a partir de los incidentes del 1 de octubre, cuando Policía Nacional y Guardia Civil trataron de impedir las votaciones del referendo ilegal -de acuerdo con las órdenes judiciales- y se produjeron choques con ciudadanos que trataron de impedirles el paso a los colegios electorales. Esa hostilidad se tradujo también, según queda reflejado en denuncias policiales, en invitaciones a que abandonasen gimnasios o a irse de hoteles y restaurantes por el simple hecho de participar en el operativo policial.

Los sindicatos policiales temen que las malas condiciones de vida continúen hasta pasadas las elecciones del 21D, ya que se da por hecho que la mayoría de ellos seguirán desplazados en Cataluña, con la posibilidad de tener que pasar allí las fiestas navideñas.

La del lunes no es la primera expedición de descanso organizada desde que comenzó el despliegue, pero sí fue la más numerosa. La mayoría de los policías llevaban desde octubre sin ver a sus familias, que solo en unos pocos casos pudieron visitarlos en Barcelona.

El barco Piolín abandona Barcelona

Mientras varios agentes regresan a Galicia para pasar unos días, varios medios ya avanzan que el barco Piolín, una de las tres embarcaciones contratadas por el Gobierno para albergar a los miles de policías enviados a Barcelona para reforzar la seguridad ante la deriva del «procés», y que se hizo célebre por las ilustraciones que adornaban uno de sus laterales, abandonará el puerto de Barcelona en los próximos días. Interior planea que desde este jueves ya no haya agentes alojados en el famoso buque que, durante el pasado mes de octubre, se convirtió en objeto de broma en las redes.