Los líderes de PP y PSOE piden poder gobernar sin intermediarios
21 abr 2019 . Actualizado a las 08:49 h.¡A Dios rogando y con el mitin dando! No han faltado candidatos provinciales y de localidades identificadas con la Semana Santa que optasen por suspender la campaña en los días religiosos clave. Lo ha hecho el PP en Zamora o Almería; el PSOE en Ronda o Albacete, o Ciudadanos en Córdoba. Pero los líderes no dan tregua, salvo Santiago Abascal, que no reapareció hasta pasados los festivos y Albert Rivera, que levantó el pie para dejar paso a Inés Arrimadas, cada vez más imagen de C’s.
Hoy se echarán a un lado también Pedro Sánchez y Pablo Iglesias. Porque un debate televisivo mal preparado puede acabar con todo, como se estudia en primero de oratoria recordando el sudor de Nixon o las muecas de Al Gore. Pero antes tocó estrategia territorial y glosar la idea clave de la campaña.
Alicante: doce escaños en juego. Pedro Sánchez, Pablo Casado e Inés Arrimadas desafiaron ayer allí el mal tiempo que hizo desistir a en cambio a Alberto Garzón de dar su mensaje. Hoy pasará Abascal por el mismo enclave. Pedro y Pablo dijeron lo mismo, desde el punto partidista de cada uno. El candidato socialista rogó a los que deseen un gobierno progresista que no caigan en la tentación de apoyar en las urnas a otros partidos de izquierda para que tutelen al PSOE. «Queremos que España mire al futuro y el futuro no tiene intermediarios y si se vota a otras opciones políticas, mayores opciones de sumar tendrá el bloque de la involución», dijo Sánchez. Y si el líder del PSOE aboga por una izquierda única, lo mismo hace sobre una derecha exclusiva Casado. Tras dibujar a un presidente «en modo avión», el candidato del PP apremió al electorado a «echar a Sánchez», para lo que aboga por un voto útil a su partido, para evitar una dispersión que acabe favoreciendo al PSOE.
Pablo Iglesias amplió en Burgos el mensaje de Sánchez, para pedir un eje PSOE-Podemos sin necesidad de más aliados, aunque por la tarde Echenique matizó que un voto útil a los socialistas abre aún más un escenario de pacto con C’s o un tripartito como en Andalucía.