El regreso a España del emérito reabre otra vieja herida dentro del Gobierno

Francisco Balado Fontenla
Fran Balado MADRID | LA VOZ

ESPAÑA

Emilio Naranjo

El PSOE muestra su «máximo respeto» y Podemos habla de «humillación». Juan Carlos I aterrizará mañana en Vigo

18 may 2022 . Actualizado a las 13:39 h.

El regreso de Juan Carlos I a España ha provocado la reapertura de una vieja disputa política en el Ejecutivo entre las dos sensibilidades que conforman la coalición. La versión oficial, verbalizada este martes por su ministra portavoz, Isabel Rodríguez, es que se trata de «una decisión personal» del rey emérito, aunque no esconden que las «explicaciones» reclamadas en el pasado por Pedro Sánchez acerca de sus supuestas irregularidades continúan «vigentes». En el PSOE muestran su «máximo respeto» por su viaje a Sanxenxo previsto para este fin de semana. Su portavoz en el Congreso, Héctor Gómez, sostiene que no hay «nada que objetar». Sin embargo, en Podemos consideran que constituye toda una «humillación».

Pablo Echenique, portavoz en la Cámara Baja de los morados, mostró el malestar de su formación: «Pensamos que se está riendo de los españoles. Ha actuado con total impunidad. Puede delinquir sin reproche penal», dijo, afirmando que este tipo de episodios contribuyen a erosionar a la Corona. «Cada vez hay más gente que no entiende por qué tenemos un jefe de Estado que se elige por fecundación», comentó. Irene Montero, ministra de Igualdad y compañera de filas de Echenique, se expresó en términos similares al alertar de una supuesta «involución democrática» del país.

Los aliados parlamentarios del Gobierno también criticaron la vuelta del emérito tras casi dos años de estancia en Abu Dabi. «No sé si lo más adecuado es aparecer en una regata», comentó Aitor Esteban, el rostro visible del PNV en la Cámara Baja. «¡Bienvenidos a la Edad Media!», ironizó Mertxe Aizpurua, la portavoz de Bildu en las Cortes. «Viene a pasar revista, a tomar posesión de sus dominios y, si puede ser, del mar, también», criticó la dirigente aberzale.

Mientras tanto, las fuerzas de la oposición coinciden en que una vez despejado su horizonte judicial en España con el archivo de las tres causas que mantenía abiertas la Fiscalía del Tribunal Supremo, no existe ningún problema al respecto.

Feijoo, «partidario» de su vuelta

El presidente del PP, Alberto Núñez Feijoo, se mostró «absolutamente partidario» de que «pueda volver a su país». En una intervención desde Ceuta, defendió que «no tiene ninguna causa pendiente en su país, es ciudadano español» y «mantiene su pasaporte», por lo que no aprecia ninguna pega sobre un asunto en el que sí percibe un intento del Gobierno en «volver a erosionar a la jefatura del Estado» sirviéndose de la figura del rey emérito como ariete. «Es un gravísimo error que una parte del Gobierno esté cuestionando la jefatura del Estado», dijo, en alusión a las críticas vertidas desde Podemos, «y la otra parte omitiendo la defensa de la jefatura del Estado» denunció, por la postura del PSOE. «No tiene causas pendientes y tiene todo el derecho a visitar o regresar a España».

Iván Espinosa de los Monteros, portavoz de Vox, también contextualizó el viaje de Juan Carlos I dentro de la «absoluta normalidad». Edmundo Bal, de Cs, se refirió al monarca como «un ciudadano libre».