Más de 250 altos cargos y 23 millones de euros en salarios en juego tras el órdago de los de Puigdemont

M. L. REDACCIÓN / LA VOZ

ESPAÑA

Imagen de la reunión del Gobierno catalán el pasado martes, 27 de septiembre
Imagen de la reunión del Gobierno catalán el pasado martes, 27 de septiembre Enric Fontcuberta | EFE

El sueldo del vicepresidente cesado superarba los 117.000 euros

01 oct 2022 . Actualizado a las 09:22 h.

La salida de Junts de la Generalitat y sus instituciones satélite conllevaría para el partido de Carles Puigdemont un agujero importante en sus arcas en un momento en el que hay engrasar la maquinaria electoral para los comicios municipales de mayo. Con su marcha cesarían más de 250 altos cargos, entre consejeros y directores generales y otros puestos de confianza, y los algo más de 23 millones de salarios que cuestan sus honorarios tampoco contribuirían a las cuotas que estas personas derivan al partido.

Esta situación, a la que se enfrentan todas las formaciones cuando hay un cambio de gobierno, es particularmente importante para Junts porque desde que en 1980 Jordi Pujol se hizo con las riendas de la Generalitat, los posconvergentes solo han dejado de manejar e influir desde el Gobierno catalán siete años, los de los Ejecutivos socialistas de Pasqual Maragall (20 de diciembre del 2003-28 de noviembre del 2006) y José Montilla (28 de noviembre del 2006-18 de diciembre del 2010).

Ya algunos dicen que no sabrían sobrevivir en la oposición. El clientelismo de más de 35 años en el poder pesa mucho en los cuadros de Junts y en su decisión de salir del Gobierno de coalición, pues son muchas las personas que irían a las listas del paro.

Esos cargos que perderían sus puesto de trabajo perciben salarios que van desde los 30.000 euros que cobran algunas secretarias a los más de 117.000 que recibía el vicepresidente cesado. Como Jordi Puigneró, los otros consejeros de Junts sobrepasan los 115.000, cuando el sueldo del propio presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, no alcanza ni los 90.000 euros.

Según datos de la Generalitat, los cerca de 200 puestos que dependen de Junts cuestan al erario público alrededor de 15 millones de euros, mientras que ocho corresponden a responsables y trabajadores en empresas públicas como consorcios, institutos y fundaciones.

El presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, pese a haberse bajado el sueldo el año pasado, sigue siendo el mejor pagado del Estado, más de 130.000 euros. En el debate para aprobar los Presupuestos catalanes del 2022, el diputado de Cs Nacho Martín recordó a sus señorías que 400 altos cargos de la Generalitat cobran más que el presidente Sánchez, o lo que es lo mismo, ganan más de 84.845 euros.