El independentismo reivindica la amnistía en una Diada con una participación en declive
ESPAÑA
Aragonès advierte en la Diada que la amnistía es el primer paso hacia un referendo de autodeterminación
11 sep 2023 . Actualizado a las 20:52 h.La reclamación de una amnistía para los encausados por el procés se ha convertido este lunes en el mínimo común denominador del independentismo en la calle, en una Diada con una participación ciudadana menor que en anteriores convocatorias.
Si el año pasado la Guardia Urbana cifró en 150.000 el número de asistentes a la manifestación independentista de la Diada, en esta edición ha recortado esa cifra hasta las 115.000 personas, muy por debajo de los números de 2019, antes de la pandemia, cuando los manifestantes llegaron a los 600.000.
Muy diferentes son los datos que aporta la ANC: ellos calculan 800.000 manifestantes, cien mil más que la cifra que dio el año pasado, unos números que contrastan con la desmovilización independentista reflejada en las urnas en las últimas elecciones.
Las diferencias estratégicas entre independentistas se han vuelto a poner de manifiesto en esta Diada, desde los llamamientos de ERC, JxCat y Òmnium Cultural a negociar amnistía y autodeterminación hasta los recelos de la ANC y la CUP a cualquier trato con el Estado.
La presidenta de la Asamblea Nacional Catalana (ANC), Dolors Feliu, ha exigido a ERC y Junts que la negociación para la investidura del presidente del Gobierno únicamente sea para que el Estado permita una independencia de Cataluña: «¡Independencia o nada! ¡Independencia o elecciones!». En su discurso, que ha culminado la manifestación independentista de la Diada, en el que cuatro columnas de manifestantes han confluido en una concentración en la Plaza España de Barcelona, Feliu ha vuelto a presionar a las fuerzas independentistas, tal y como informa Efe. «Ha de quedar claro que cualquier pacto en Madrid solo sirve si tiene efectos directos para conseguir la independencia», ha señalado Feliu, que ha avisado a los partidos independentistas de que «si no se atreven, que dejen paso y convoquen elecciones», para las que ha recordado que la ANC presentará una lista cívica independentista.
Aragonés y ERC acudieron a la manifestación
Después de que el año pasado ERC renunciara a asistir a la manifestación, molesta por el tono crítico de la ANC con la estrategia de diálogo, esta vez los republicanos sí se han sumado a la convocatoria, si bien Oriol Junqueras ha causado baja por covid.
Uno de los participantes era el presidente catalán, Pere Aragonès, junto a otros miembros del Govern y de la dirección de ERC, que en un momento de la marcha han escuchado gritos de «Govern dimisión» y a favor de levantar la suspensión de la declaración unilateral de independencia de 2017, por parte de un reducido grupo de personas, al que otros manifestantes han contestado coreando «Independencia».
En un acto previo de ERC, Aragonès ha avisado a los poderes del Estado de que la amnistía es el «primer paso» para abrir camino hacia un referéndum.
Los matices de Junts
Consciente de que todas las miradas se centran en los movimientos de JxCat, clave para una posible investidura de Pedro Sánchez, el secretario general de Junts, Jordi Turull, ha hecho un llamamiento a «no caer en la ingenuidad a la hora de negociar cualquier cosa» con el Estado y ha advertido de que su partido «no renunciará a nada».
La presidenta de JxCat, Laura Borràs, ha afirmado que los ciudadanos «no piden investidura», sino «independencia», y ha advertido de que los votos de su partido servirán «para resolver el conflicto», no para «apuntalar a gobiernos españoles».
Desde Madrid, la vicesecretaria general del PSOE y ministra de Hacienda en funciones, María Jesús Montero, ha avisado de que el expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont está en «posición de máximos».
El líder del PP, Alberto Núñez Feijoo, ha defendido responder al «desafío separatista» y las posibles cesiones de Sánchez ante el independentismo catalán desde todos los «rincones», de las ciudades a los parlamentos autonómicos, las Cortes y también la Justicia.
Òmnium Cultural ha celebrado un acto propio, donde su presidente, Xavier Antich, ha pedido aprovechar que el independentismo tiene la llave de la investidura para «materializar» los consensos sobre la amnistía y la autodeterminación: «La aritmética nos es favorable y no podemos perder esta oportunidad».
Antich ha afirmado que en la actualidad hay «más de 4.400 personas represaliadas» y, en concreto, un total de 1.432 han sido «juzgadas, condenadas o investigadas» por cuestiones que «no son ningún delito, sino el ejercicio de derechos fundamentales» y para las que solo vale una amnistía.
Mensajes del PSC
Las celebraciones de la Diada se han iniciado por la mañana con la tradicional ofrenda al monumento a Rafael Casanova, desde donde el primer secretario del PSC, Salvador Illa, ha definido los «cuatro puntos cardinales» de su formación ante las negociaciones de investidura: «Paciencia, discreción, prudencia y Constitución».
La presidenta de En Comú Podem en el Parlament, Jéssica Albiach, ha destacado que esta Diada representa un «punto de inflexión» para un «nuevo comienzo» en Cataluña a través de una amnistía.
Desde El Vendrell (Tarragona), donde ha participado en una ofrenda a la estatua dedicada al violoncelista Pau Casals, el presidente del PP de Cataluña, Alejandro Fernández, ha instado al independentismo a «renunciar a iniciar una segunda etapa» del 'procés'.
Según ha explicado en una rueda de prensa en Barcelona, el eurodiputado de Ciudadanos Adrián Vázquez ha enviado una carta a la presidenta del Parlamento Europeo, Roberta Metsola, para instarla a suspender de empleo y sueldo y retirar temporalmente el acta a los tres eurodiputados de JxCat, Carles Puigdemont, Antoni Comín y Clara Ponsatí, así como al de ERC, Jordi Solé.