El rey pide ahondar las relaciones con Estados Unidos en la clausura del encuentro de embajadores españoles
ESPAÑA
Recuerda al cuerpo diplomático la exitencia de la desinformación «muchas veces desbordante y de difícil corrección»
15 ene 2025 . Actualizado a las 05:00 h.Felipe VI apostó ayer, ante los embajadores españoles, por ahondar, en la nueva etapa política que se abre en unos días con la toma de posesión de Donald Trump, en la relación con Estados Unidos y defendió el multilateralismo como forma de defender un mundo «definido por el derecho, no por la ley del más fuerte», recoge Efe.
Así lo indicó el rey en la clausura de la Conferencia de Embajadores de España, organizada por el Ministerio de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, donde recordó a los jefes de misión de España en el mundo que la democracia «es una responsabilidad que concierne a todos, autoridades y ciudadanos, de manera cotidiana, con acatamiento de sus normas y respeto a sus valores y equilibrios como la tolerancia, el pluralismo, la separación de poderes, la transparencia y la rendición de cuentas».
En su intervención ante los 130 embajadores que durante dos días se reunieron en Madrid para analizar en la novena conferencia los retos internacionales a los que se enfrentan este año, el monarca consideró que el cuestionado multilateralismo es la mejor salvaguardia «para no tropezar en las mismas piedras de la historia; para defender un mundo definido por el derecho, no por la ley del más fuerte».
El rey insistió en la necesidad de seguir haciendo valer la condición de España «de aliado necesario», tanto a nivel bilateral como en el marco de la OTAN y reiteró que la ampliación de la presencia estadounidense en la base naval de Rota refuerza y prueba esa percepción.
«La nueva etapa política que en breve se abrirá en Washington, debemos encararla con el ánimo de ahondar en esta relación, sobre la base de una agenda positiva en materia de prosperidad y seguridad, aportando nuestra sensibilidad histórica y cultural y nuestra visión del hemisferio americano», recalcó.
También aludió el jefe de Estado al escenario internacional con guerras o conflictos abiertos de gran violencia y otras situaciones como la pobreza extrema, el hambre, la emergencia climática, la desinformación «muchas veces desbordante y de difícil corrección», o el cuestionamiento de la democracia como forma de gobierno, «incluso donde parecía fuertemente arraigada».
El monarca destacó asimismo la necesaria búsqueda del «bien común» y animó a los embajadores a llevar la imagen de España, un país abierto, dinámico, emprendedor, tolerante, orgulloso de su historia [sin negar sus capítulos oscuros] y de su presente, partidario de la paz y de la palabra«.
Al destacar el compromiso de España por la paz, señaló cómo este país ha dado, con el reconocimiento del Estado de Palestina, un «paso decisivo» en su política exterior, para contribuir a la estabilidad y sentar las bases de una paz justa y duradera en torno a la solución de los dos Estados, lo que ha hecho también al ofrecerse para acoger una conferencia de paz.
Para el rey, la paz en Oriente Medio, «por idealista que pueda seguir pareciendo», solo será posible cuando las dinámicas de enfrentamiento den paso a relaciones de vecindad basadas en la conciencia de una seguridad y una prosperidad compartidas.
También se refirió, informa Efe, a la invasión de Ucrania y, cuando están a punto de cumplirse tres años del conflicto, indicó que Ucrania no está sola.
El rey también se refirió a las relaciones con los países del Magreb, unas relaciones clave, dijo y en las que España seguirá progresando en las agendas bilaterales con estos países, particularmente con Marruecos.