Hallan los restos de los dos ocupantes de la avioneta accidentada en Mallorca

La Voz MADRID / LA VOZ

ESPAÑA

Los equipos de rescate buscan los cuerpos de los ocupantes de la avioneta en la zona del accidente.
Los equipos de rescate buscan los cuerpos de los ocupantes de la avioneta en la zona del accidente. MIQUEL A. BORRÀS / EFE

El padre trabajaba en Alemania como piloto comercial y falleció junto a su hijo de 13 años

04 ago 2025 . Actualizado a las 05:00 h.

Los cuerpos sin vida del piloto de la avioneta caída este sábado al mar frente al faro del puerto de Sóller (Mallorca) y de su hijo, menor de edad, fueron recuperados este domingo por los equipos de rescate, que llevaban trabajando desde el sábado en la búsqueda de los restos del aparato. Los fallecidos son un hombre de 60 años de nacionalidad estadounidense y su hijo de 13 años, que le acompañaba durante el vuelo acrobático.

Según informó la Guardia Civil aproximadamente sobre las 13.00 horas de este domingo los especialistas del Grupo Especial de Actividades Subacuáticas de la Guardia Civil (GEAS) dentro del operativo de búsqueda conformado entre Emergencias, Sasemar, Armada, Ejercito del Aire y Guardia Civil recuperaron los cuerpos sin vida del piloto y su hijo que le acompañaba, siendo estos trasladados al puerto de Sóller, al norte de la isla de Mallorca, y posteriormente al Instituto Anatómico Forense para que se les practique la autopsia. La Guardia Civil se ha hecho cargo de la investigación de las causas del accidente..

Un piloto experimentado

El siniestro se produjo sobre las 20.00 horas del sábado, frente al faro del puerto de Sóller y en aguas con una profundidad de unos 30 metros, en un área muy transitada por embarcaciones de recreo. La avioneta acrobática biplaza había salido del aeródromo de Binissalem unas dos horas antes, sobre las 18.00 horas. Según adelantó el diario Abc, el piloto, de 60 años, era un exmilitar estadounidense residente en Alemania con amplia experiencia en el manejo de cazas F-18 y F-14 embarcados en portaviones.

El fallecido trabajaba en Alemania como piloto comercial y pasaba temporadas en Mallorca, donde tenía una segunda residencia. La avioneta era una Harmon Rocket biplaza, de su propiedad, con la que podía llegar a alcanzar los 300 kilómetros por hora. El mismo sábado se encontraron los restos de la avioneta.

Según precisó el servicio de Emergencias 112 en Baleares, varias embarcaciones que vieron el accidente divisaron restos flotando de la aeronave, que acabó hundiéndose. A las 20.07 horas del sábado, el servicio de Emergencias 112 en Baleares recibió una llamada de una persona que había presenciado el accidente. Varias grupos de personas que navegaban por la zona también vieron la caída de la avioneta, que poco antes realizaba acrobacias que fueron grabadas por algunas de los presentes.