Inspirada en el proyecto de reurbanización ejecutado por Barcelona para los juegos olímpicos de 1992, la recuperación de la zona portuaria de Río es la mayor novedad turística de la ciudad para la olimpiada
28 feb 2016 . Actualizado a las 05:00 h.En las nuevas infraestructuras para las olimpiadas brasileñas se invirtieron ocho mil millones de reales (cerca de dos mil millones de euros), una gran parte para la restauración de un área de cinco millones de metros cuadrados. La zona pasó a contar con jardines, paseos peatonales y nueva iluminación, además de centros culturales, deportivos y gastronómicos.
El principal símbolo de la zona es el recién inaugurado Museu do Amanhã (Museo del Mañana). Diseñado por el arquitecto valenciano Santiago Calatrava, un lugar que ofrece una mirada interactiva hacia el futuro. Para acceder al espacio, no obstante, uno puede llegar a esperar hasta tres horas en las colas, formadas bajo el sol en la restaurada, pero sin árboles, Plaza Mauá.
Las novedades de la ciudad para los Juegos Olímpicos también incluyen la reactivación del tranvía histórico de Santa Teresa, además de la implantación de más de 400 kilómetros de ciclovías, que convirtieron Río de Janeiro en la ciudad de Latinoamérica con la mayor extensión de fajas exclusivas para las bicicletas. El tramo más reciente, con 3,9 kilómetros, conecta a los barrios del Leblon y São Conrado, a través de una pista construida en un acantilado. «É unha excelente opción para o ciclista e o peón», cuenta Fabio Silva, tras probar el trayecto. Para él, «Foi incrible pedalear sen preocuparse con coches, motocicletas ou autobuses». Por su padre, Ingrid Ferreiro destaca que Río es «unha cidade que está innovando para que a experiencia de coñecela non sexa soamente visitar o Corcovado e o Pão de Açúcar». Más allá de los paseos tradicionales, ella recomienda asistir a un partido de voley playa, a una clase para aprender a hacer feijoada (el plato típico de Brasil), además de visitar a los diversos estudios de arte. «A oferta cultural e gastronómica do Río vai fascinar aos visitantes de todas as idades», dice. Al final, la ourensana sugiere a los que planeen viajar a Río por los juegos que vuelvan después, en otra oportunidad. «Así poderán coñecer mellor todo o charme do caos desa cidade maravillosa». Ingrid ha logrado entrada para la semifinal masculina del tenis. También asistirá a alguna competición de remo. Cree que todo estará listo para los juegos, pero no como debería. «Durante o período olímpico, quen sufrirá as consecuencias do evento serán os que viven na cidade, que verán as súas vidas condicionadas por un evento que non vai repercutir no mesmo grao en melloras para o seu día a día. Algunha cousa mellorará, mais en detrimento diso terá tantas outras que irán a peor, o que me fai pensar se vale a pena facernos pasar por iso. Mentres novas infraestruturas estão sendo erguidas para o evento, hospitais públicos do estado están fechando por falta de diñeiro. Este é un mero exemplo da ilóxica na que vivimos». Fabio Silva, a su vez, destaca que «Río está a prepararse moito para os jogos», mencionando como ejemplo la implantación de corredores de autobuses y de un sistema moderno de tranvías. «Creo que a Olimpiada será un gran éxito. Non só polas estruturas, senón polos brasileiros, que así como no Mundial, van acoller a todos os turistas dunha maneira incrible». En el hotel Galicia, Fabio y Juan Carlos esperan un aumento entre el 50 y el 68 % en los ingresos durante los juegos, además de un incremento de un 40% en el número de clientes. Para el evento, los dos gerentes están reformando todo el hotel. «Xa temos a maioria de habitacions reformadas e a recepcion. Apenas faltan algunhas habitacións e o restaurante. Tamén pasamos de trinta e tres habitacions que tiñamos en 2012 ás cincuenta e seis que temos actualmente, e noso obxectivo é seguir aumentando», cuenta Juan.