Se han cumplido 10 años del iPhone y en unos días se presentará el nuevo modelo. Se espera que el próximo dispositivo suponga una nueva revolución en la industria. ¿Cumplirá las expectativas?
27 ago 2017 . Actualizado a las 13:05 h.Apple ya ha vendido más de mil millones de iPhone desde que se puso a la venta a finales del año 2007. El producto más importante para la compañía supone a día de hoy casi el 60% de sus ingresos y se ha convertido por méritos propios en el modelo de referencia y en el que se ha inspirado siempre la competencia. Si somos realistas esta competencia ya no solo mira hacia Apple para analizar sus avances, sino que en muchas ocasiones le deja rezagado gracias a la agilidad en el desarrollo de nuevos productos.
Ya se ha presentado el buque insignia de Samsung, el Galaxy Note 8, un terminal impresionante en capacidades y sobre todo en posibilidades que parece destinado a entrar en las empresas para conectarse a un monitor, un teclado y un ratón y así hacer las funciones de un PC. Enorme esta visión ambiciosa de Samsung que se agradece muchísimo en un momento en el que la industria móvil parece estancada en cuanto a las grandes innovaciones.
Hace una semana tan solo era Nokia quien presentaba su esperado terminal de gama alta, el Nokia 8, para completar por fin una serie de dispositivos con Android que han ilusionado de nuevo a muchos apasionados de la marca. Es un terminal marcado por sus muy altas especificaciones y por una cámara doble que ya es un clásico entre los dispositivos más avanzados. Podría ser, junto a los Galaxy de la serie 8 de Samsung, un digno rival del nuevo iPhone.
El 12 de septiembre
En la presentación del próximo 12 de septiembre Apple pondrá sobre la mesa su nuevo iPhone 8, o quizá le denominará iPhone Edition o iPhone X, y se espera que también los iPhone 7S y 7S Plus, pero lo que se espera de ellos es que descubran un nuevo camino en la forma de relacionarse con los dispositivos móviles.
El reconocimiento facial se ha probado en muchos dispositivos como uno de los métodos alternativos para el desbloqueo del terminal, pero en todos los casos ha ofrecido serias dudas sobre su fiabilidad y su seguridad. Todo apunta a que Apple, como había hecho con el lector de huella en sus dispositivos móviles, incorpore esta característica en sus nuevos dispositivos y veamos cómo lo que muchos ya intentaron hace años se hace ahora de una forma realmente simple y segura. Eso es lo que Apple consigue: convertir tecnologías que nunca han llegado a cuajar en soluciones imprescindibles y de una eficacia total.
Interior prometedor
El iPhone de 2017 será una mezcla de grandes novedades estéticas, ya que el frontal se olvida del botón principal, las curvas de los cristales son más pronunciadas y pierde los cantos biselados para pasar a ser un «teléfono de cristal». Las cámaras tanto frontal como trasera vienen preparadas para reconocer nuestro rostro de una manera casi instantánea y actuar en consecuencia para proceder al pago, desbloquear el terminal o decidir que no muestra notificaciones para no molestar en lo que estemos haciendo.
Pero no solo en cuestiones estéticas sorprenderán los nuevos iPhone; es el interior de su sistema operativo donde se integran las novedades que esperamos hagan que el dispositivo nos parezca realmente revolucionario. Ya se han podido ver varios vídeos que acompañaban durante las fases de pruebas (Beta) de iOS 11 cómo los métodos para interactuar con el terminal son realmente novedosos, si bien siguen cediendo todo el protagonismo a los gestos táctiles frente a otras posibilidades.
La batería es el caballo de batalla en el que los usuarios apreciamos menos avances en los últimos años. Crece el rendimiento pero no tanto como las pantallas, las capacidades de las cámaras o los procesadores y memorias. El nuevo iPhone incorporará con mucha probabilidad carga inalámbrica para facilitar la carga en movilidad, si bien los rumores que confirman la existencia de un accesorio de carga inalámbrica hacen pensar que no será precisamente cómodo tener dependencia de un accesorio extra.
Evolución o revolución en un dispositivo móvil supone que todo cambie a partir de la presentación del dispositivo. Apple tiene la capacidad para revolucionar una y otra vez el mercado. Veremos si este año toca revolución.