El próximo día 21 se celebrará la primera huelga de las administraciones de lotería en 250 años de historia. Con este cierre, el sector mostrará su rechazo al cambio del régimen de comercialización de Loterías del Estado. Las asociaciones consideran que las reformas llevadas a cabo por la dirección de Loterías y Apuestas del Estado (LAE) están diseñadas «para privatizar los juegos del Estado a espaldas de la sociedad», perjudicando además la venta tradicional de décimos.
La reforma, aprobada a través de dos disposiciones adicionales, la 32 y 34, de la Ley de Presupuestos Generales del Estado, establece que la comercialización de este juego pase a regirse por las normas de derecho privado. Así, el actual sistema, sustentado en las concesiones, deja paso a otro basado en los contratos mercantiles privados.
Manuel Izquierdo, el presidente de la Mesa de Asociaciones, que agrupa a Anapal, Fenapal y APLA, considera que la reforma está «plagada de irregularidades económicas y de procedimiento, y mantiene en la incertidumbre desde hace tres años a 4.000 pymes o administraciones de lotería». Los loteros piden la paralización de esta reforma, «que pone en peligro la lotería nacional de billetes, patrimonio económico y cultural con el que se financian tradiciones culturales y asociaciones ciudadanas». Además, el gremio exige la elaboración de una ley de juego público. Izquierdo lamentó que se intente cambiar el actual «modelo público, nueve veces más eficaz y productivo que los existentes en la UE», sin el consenso de afectados y grupos políticos. La reforma ha sido recurrida por el PP ante el Tribunal Constitucional y la Mesa de Asociaciones pidió la máxima participación en la huelga, aunque la Plataforma Independiente de Lotería ya ha rechazado la convocatoria.