El comercio aboga por una actuación integral en Ferrol para atraer clientes

Beatriz García Couce
Beatriz Couce FERROL / LA VOZ

FERROL

CÉSAR TOIMIL

Las patronales consideran imprescindible la mejora de los aparcamientos para su actividad

03 feb 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

Son tiempos difíciles para el consumo, y comerciantes y hosteleros son el primer termómetro que verifica el calado de la crisis. Los profesionales del sector tienen claro que en estos momentos luchar contra una tasa de paro y una sangría de población en máximos históricos y con una recesión de la que aún no se ve la puerta de salida es tarea de titanes, por lo que aseguran que en estos momentos, para muchos la prioridad es impedir que el vendaval se les lleve por delante, como les ha sucedido ya a un amplio número de comerciantes del casco histórico. No obstante, el sector reivindica su futuro y apela a las distintas acciones que ha llevado a cabo para intentar atraer la atención de los clientes a lo largo de los últimos años, aunque, junto a los hosteleros, marca su prioridad en el desarrollo de actuaciones de mejora integral de la ciudad para aumentar su papel como foco de ventas en estos momentos delicados.

Así se puso de manifiesto esta misma semana en la segunda edición del Foro Voz Ferrol organizado por el Grupo Voz en colaboración con el Concello, el Puerto, la Confederación de Empresarios de Ferrolterra, Eume y Ortegal (Cofer) y la Asociación de Empresarios Ferrolterra bajo el título Pequeño comercio, el corazón de la ciudad. Celebrado en la sede de la Fundación Novacaixagalicia, participaron en el debate el concejal de Economía e Facenda, Alejandro Langtry; el presidente del Centro Comercial Aberto A Magdalena, Cristóbal García Nores; su homólogo en Novo Ferrol, Francisco Fajardo; Aldo Regueira, responsable de la Asociación de Empresarios, Comerciantes y Hosteleros (ECHO) Catabois; y Emilio Vázquez, de la Asociación de Empresarios de Hostelería de Ferrol y Comarca.

«El tema más acuciante es el urbanismo comercial, hay que arreglar las calles, facilitar el aparcamiento y poner fin al deterioro de muchas casas, que se están cayendo», aseguró García Nores, quien reclamó la implantación del sistema de la ORA en la ciudad, aunque sea bonificado.

La falta de rotación en el aparcamiento es también un problema para el comercio de Ultramar, manifestó Francisco Fajardo, quien recordó que hace años que la calle Venezuela tiene pintada la zona azul, que podría entrar en funcionar sin coste alguno para las arcas municipales. Sin embargo, insistió en que mientras que el paro no se reduzca y se acaben los ajustes para familias y empresas, el consumo no va a recuperarse.

En Catabois, la supresión de plazas de estacionamiento como consecuencia de la remodelación de la principal arteria del barrio es también una dificultad manifiesta para el sector. Aldo Regueira subrayó que la nueva ley de horarios comerciales es un escollo más que tendrán que salvar los pequeños establecimientos para poder competir con las grandes áreas.

Langtry apuntó: «La crisis afecta a todos y no tenemos la solución para todos los sectores, pero diseñamos un plan de dinamización ambicioso que nos demandaron comerciantes y hosteleros, aunque es verdad que nos va a llevar un tiempo ponerlo a funcionar». Entre otras actuaciones, el programa contempla acciones de formación, urbanísticas -como eliminación de barreras y ampliación de las zonas de acceso al tráfico rodado en las calles peatonales- y la creación de una bolsa de alquiler de locales comerciales.

A este plan hay que sumar el Urban, a cuyo amparo se han promovido algunas ayudas para efectuar mejoras en los establecimientos, aunque las organizaciones consideran que no están teniendo el éxito esperado.

Emilio Vázquez, de la patronal hostelera, subrayó que mientras que no haya una recuperación de la situación económica, el sector seguirá en crisis, aunque abogó por potenciar turísticamente Ferrol y sus tradiciones propias, como las Pepitas.