
La fragata mandará aún la flota SNMG-2 de la OTAN hasta inicios de julio
15 jun 2014 . Actualizado a las 07:00 h.La fragata Cristóbal Colón (F-105) ha puesto punto final a su labor contra la piratería en el Índico. La Armada tenía previsto que ayer tuviese lugar el relevo en esta tarea de la flota permanente de la OTAN SNMG-2, de la cual está al mando la unidad ferrolana, por parte de su fuerza naval gemela, la SNMG-1.
Ahora comenzará la navegación de regreso a su base del Arsenal de Ferrol, aunque todavía mantendrá la F-105 el mando de esta agrupación aliada hasta comienzos del próximo mes de julio. En esas fechas, y después de participar durante su singladura por el Mediterráneo en el operativo antiterrorista Active Endeavour, la unidad recalará en Málaga.
Allí un mando estadounidense asumirá la máxima responsabilidad de este país sobre la SNMG-2, mando que durante el último año le ha correspondido a España, que lo ha ejercido siempre con buques de la serie F-100 con unidades insignia.
De este modo, y si no se producen contratiempos, la Cristóbal Colón amarrará en Ferrol a mediados del próximo mes. Como es habitual, está previsto que haya una ceremonia oficial para el recibimiento del barco en el que estarán presentes familiares y amigos de la dotación.
El despliegue de la F-105 se ha caracterizado por la combinación de múltiples tareas, que ha desarrollado de una manera satisfactoria a pesar de las exigencias de los cometidos.
Así, por poner algunos ejemplos, la dotación de la unidad ha estado marcada por vigilancias y patrullas en un escenario geográfico muy amplio; abordajes e inspecciones de todas aquellas embarcaciones que pudiesen considerarse sospechosas; acciones de ayuda humanitaria; paradas en puertos con el objetivo de conciencia a las autoridades locales de la necesidad de la lucha contra la piratería, ejercicios con unidades aliadas y de otros países que se encontraban en la zona de patrulla...
Tarea comercial
Especialmente destacada ha sido, no obstante, la tarea comercial desplegada por la fragata más moderna de la Armada española con el objetivo de respaldar las opciones comerciales de Navantia y contribuir a la apertura de mercados para los astilleros públicos.
Recientemente, por poner un ejemplo, recaló la unidad en Arabia Saudí para que la Armada de ese país pudiese conocer el buque y sus capacidades, además de recorrerlo.
Con anterioridad también estuvo la F-105 en Doha (Catar) en la mayor feria de construcción naval de Oriente Medio para promover su diseño entre países con economías emergentes.
El operativo del buque se ha caracterizado por su respaldo a Navantia