Tras el rescate del lunes, el grupo municipal del PSOE, que advertía antes de que se produjera del riesgo de dejar las playas sin vigilancia mientras dure el buen tiempo en septiembre, calificó de «escándalo» la actitud del gobierno local. Al alcalde y su equipo le reprochan que «la administración local incumpla su propia norma», apuntó el concejal Jaime Pena. Y reprochó que «sea más importante el ahorro de unos miles de euros» que evitar que corran riesgo vidas humanas. «No entendemos el cuajo del alcalde de poder dormir después de lo que pasó», añadió. IU advirtió a Rey Varela de que «o maior imprudente é el e non os bañistas» y exige una rectificación ante lo que pudo haber sido «unha traxedia». También Xuventudes Socialistas acusó al gobierno local de «irresponsabilidade».
El alcalde rebatía ayer que «aquí lo fácil es repartir dinero» pero que después «las facturas acaban en los cajones». Sostiene que el remanente de diez millones que quedó el pasado año está ya incorporado en los presupuestos y que no podrían destinarse a la vigilancia de arenales al tratarse de gasto corriente. Presumió de haber incrementado el número de banderas azules y demás, expresó su deseo de que el próximo año se pueda «ampliar» el calendario de vigilancia. Que la asuma Protección Civil, dijo, es una fórmula «viable».