Es uno de los compositores contemporáneos más aplaudidos y solo dará dos recitales en Galicia
18 abr 2017 . Actualizado a las 05:00 h.Las críticas de los conciertos del pianista francés Eric Le Sage siempre incluyen dos palabras: cálido y virtuoso. Por algo cuando este intérprete contaba veinte años, el Financial Times lo describió como «un discípulo extremadamente cultivado de la gran tradición francesa del piano de Schumann». El Auditorio de Caranza acoge el viernes la segunda de sus dos únicas actuaciones en Galicia con la Real Filharmonía de Galicia, ya que el jueves estará en Santiago. Y lo hace dentro del ciclo organizado por la Sociedad Filarmónica Ferrolana, que el 27 ofrece otro recital, con el director estadounidense Dennis Russel Davies y la Orquesta Sinfónica de Galicia. Para ambos conciertos habrá buses gratuitos. La parada de recogida será la de Correos y al término del recital la audiencia regresará a este lugar.
El viernes (20.30 horas) llevará la batuta el maestro parisino Fabien Gabel. Los conciertos comenzarán con la obertura Ruy Blas del compositor romántico alemán Felix Mendelssohn basada en el drama homónimo de Víctor Hugo. Mendelssohn escribió en solo tres días esta obra.
Le seguirá el Concierto para piano en la menor del alemán Robert Schumann, obra considerada como una de las columnas básicas del repertorio para piano y orquesta. De hecho, se estrenó en Leipzig en el 1846, con la esposa del compositor, Clara, como extraordinaria solista, que luego la tocaría en las salas de concierto de toda Europa. Es una partitura de especial dificultad que permitirá comprobar la calidad del músico francés Eric Le Sage, reconocido como uno de los grandes pianistas de su generación. El recital concluirá con la Sinfonía número cuatro Deliciae Basiliensis del compositor suizo Arthur Honegger, creada para celebrar el aniversario de la fundación de la Orquesta de Cámara de Basilea.
Batuta parisina
El maestro parisino Fabien Gabel cuenta con otra trayectoria fructífera (comenzó a los seis años). Fue director musical de la Orquesta Sinfónica de Quebec y es uno de los directores más reconocidos.
El recital forma parte de la programación de la Filarmónica, que invita a los melómanos a que se hagan socios. Cada particular puede abonar 20 euros por trimestre (y cuatro por cada entrada a los conciertos): los infantiles, 10 y los socios empresariales, que figuran en cada programa, 25 cada tres meses.