Sin tiempo no hay cultura

Juan Luis Montero Fenollós TRIBUNA

FERROL

27 sep 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

Cultura y tiempo son dos conceptos maltratados en la actualidad. Estamos acostumbrados a escuchar que la cultura es algo prescindible. Si hay que hacer recortes, la cultura es el candidato perfecto. Sin embargo, la UNESCO considera que la cultura es la que hace de nosotros seres específicamente humanos, racionales, críticos y éticamente comprometidos. ¿Se puede vivir sin cultura? La respuesta es evidente: no. La cultura es la que nos da la capacidad crítica de reflexionar sobre nosotros mismos y nuestro entorno. El término cultura deriva del verbo latino colere, que significa cultivar la tierra. Si originariamente hacía referencia a la actividad agrícola, ahora cultura sería el cultivo del espíritu humano, de las facultades intelectuales. Hoy, las escuelas y universidades son su espacio natural, donde la buena enseñanza requiere de tiempo. Pero nuestra vida está afectada por la prisa continua. Debemos vivir deprisa, sin pausa posible. El tiempo es una dimensión que ya no nos pertenece y que malgastamos en tareas triviales. Hemos perdido el placer de vivir y de aprender lentamente.

Nietzsche publicó sin prefacio su libro Aurora. Lo escribió seis años después. Para justificar este inusual retraso, el filósofo alemán hizo un magnífico elogio del valor de la lentitud. ¡Cuántas cosas nos estamos perdiendo por pensar que no tenemos tiempo! Cultivar una relación humana requiere de tiempo. Con la rapidez solo se construyen lazos superficiales. La amistad, el diálogo o el saber precisan de mucho tiempo. Sin tiempo no hay cultura y sin cultura somos menos humanos.