Los alquileres de trabajadores del naval han reducido la oferta para universitarios
11 jul 2024 . Actualizado a las 05:00 h.Recién publicadas el pasado lunes las notas de corte para acceder a las carreras universitarias, la pugna por encontrar un piso en las diferentes ciudades de Galicia acaba de comenzar entre los estudiantes.
Hallar un inmueble nunca fue una tarea sencilla para los universitarios de la comunidad. No obstante, para el siguiente curso, la búsqueda se ha complicado aún más debido, principalmente, a dos factores: la disminución de la oferta y el aumento de los precios.
Ferrol no se ha quedado al margen. Respecto al año pasado «ningún piso mantiene el precio, están subiendo entre 50 y 100 euros», afirma Cristina, de la inmobiliaria Inmonosa. Por su parte, Marta Saavedra de la inmobiliaria Artemisa destaca que para el próximo curso hay menos pisos y más caros. De cara al año escolar 2024/2025, los estudiantes en Ferrol pagarán, asegura, «mínimo 200 euros más gastos por habitación, salvo contadas excepciones».
En cuanto a las razones del encarecimiento de los alquileres y la bajada de la oferta no se puede identificar un causante único y definido. Álvaro Canosa, responsable de la inmobiliaria Inmonosa, achaca la subida de los precios al incremento de los gastos de los propietarios, la mejor calidad y prestaciones de los pisos y la creciente demanda. Su compañera Cristina relaciona este hecho con la disminución de la oferta de pisos en Ferrol: «La gente renueva sus contratos por no cambiarse a un piso más caro». Desde Artemisa, por otro lado, resaltan que hay muchos pisos ocupados por alquileres temporales de trabajadores del astillero, militares o estudiantes que renuevan sus contratos. Arcadio Ares, director de la inmobiliaria El Callao, también cita las viviendas arrendadas a trabajadores del astillero y a los militares como causa del decrecimiento de la oferta. Además de mencionar el incremento en la llegada de universitarios a la ciudad.
Son bienvenidos
En el proceso de búsqueda, en muchas ocasiones los jóvenes se encuentran con estupendos pisos que estarían encantados de arrendar hasta que se topan con el temido mensaje: «No se alquila a estudiantes».
Sin embargo, las inmobiliarias ferrolanas coinciden en que este sesgo no se da en la ciudad departamental. «A los estudiantes no se les discrimina», afirma Marta Saavedra. Y añade que en «la zona de Esteiro hay muchos pisos que son para estudiantes». Cristina destaca que, lejos de no aceptar estudiantes en sus pisos, hay propietarios que lo prefieren por el tipo de contrato: «Hay caseros que quieren alquilar a estudiantes con el objetivo de tener el piso libre en verano para usarlo ellos mismos o poder alquilarlo como vivienda vacacional». Para muchos arrendadores el de los inmuebles universitarios es un «mercado apetecible», señala Álvaro Canosa. Por su parte, Arcadio Ares apunta que son pocos los propietarios que no aceptan estudiantes en sus pisos y los que «lo hacen es porque buscan contratos de alquiler de larga duración»
En lo tocante a las habituales quejas de los estudiantes en los pisos, Marta Saavedra cuenta que «no suelen dar problemas». Y apuntan al que acostumbra ser el principal debe de los universitarios: «A veces los pisos no quedan limpios, pero para eso ponemos una cláusula de limpieza».
En cuanto a las preferencias de localización de los propios estudiantes, el director de El Callao cuenta que Esteiro y algunas zonas próximas como la plaza de España, el centro o Ultramar son los lugares más solicitados en Ferrol.
Ferrol solo cuenta con una residencia universitaria, con apenas una veintena de plazas
Ante el problema para encontrar piso, se presenta la posibilidad de buscar otras opciones, las residencias universitarias. Ferrol solo cuenta con una residencia pública que, para el curso que entra, ofrece 21 plazas, 15 en habitaciones individuales y 6 en compartidas. Además, de las veintiuna plazas, cinco se reservan para nuevos alumnos de la universidad, una para personas con movilidad reducida y otra para deportistas de alto rendimiento.
En cuanto a los precios, los alumnos que perciben la beca del Ministerio de Educación u otras similares pagarán 275 euros mensuales por una habitación individual o 253 euros por una compartida. Para quien no cuente con dichas ayudas, los precios oscilarán entre los 107 y 152 euros por la individual o entre 74 y 119 euros por una compartida en función de la Renta Personal Disponible.