Los fines de semana casi sin agua en Ares: «Non hai para ducharse, temos a bañeira chea para limpar o váter»

Patricia Hermida Torrente
Patricia Hermida ARES / LA VOZ

ARES

Beatriz Rico abre el grifo en los momentos de mayor presión, a primera hora de la mañana.
Beatriz Rico abre el grifo en los momentos de mayor presión, a primera hora de la mañana. César Toimil

El Concello lo atribuye a que se triplicó la población, a que la red se extendió a todo el municipio y a que Augas de Galicia aún no licitó la obra de nuevos depósitos

09 ago 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

Ares, oasis turístico para toda España. Pero también con los inconvenientes derivados de semejante aluvión. Porque desde hace 15 años vecinos y veraneantes padecen la escasa presión en la traída del agua, sobre todo a la hora de la ducha. «A problemática agrávase en xullo cando aumenta tanto a poboación, abres o grifo e sae pouca auga... e durante as mañás da fin de semana case ningunha», explican vecinos como Beatriz Rico, que reside en un dúplex con su familia (cuarto y quinto en la calle Santa Bárbara). A mayor altura del edificio, mayores problemas en el suministro. El Concello admite que esta problemática persiste. Y el alcalde Julio Iglesias la achaca a tres factores: «En verano se triplica la población, nosotros extendimos la red del agua a todo el municipio (no solo al centro de Ares) y Augas de Galicia aún tiene pendiente de licitación la obra de los depósitos de Simou».

Mientras tanto, parte de los vecinos sufren las siguientes dificultades. Llega julio, los residentes pasan de 6.200 a casi 18.000, «non hai auga para ducharse nas fines de semana, e temos a bañeira chea para usar na cisterna e limpar o váter». En casa de Beatriz viven ella, su marido y su hijo (antes eran cuatro pero su hija ya se independizó). Por semana, en las mañanas aún hay algo de presión pero no como el resto del año: «Tes que poñer a lavadora ou o lavavaixelas ás 07.00 da mañá ou ás 22.30 da noite, porque como polo medio non hai suficiente presión os electrodomésticos non dan funcionado e poden estropearse (eu xa vou polo terceiro termo de auga)». Otro momento crítico pasa por las duchas al regreso de las playas, «case imposible, mellor sempre ducharse a primeira hora».

Los fines de semana se llenan las bañeras para atender la cisterna, como reserva para las horas en la que no hay agua.
Los fines de semana se llenan las bañeras para atender la cisterna, como reserva para las horas en la que no hay agua. César Toimil

Y ya los fines de semana, «a situación é escandalosa, desde as 09.30 ata as 14.00 hai un fío de auga e ás veces nin unha gota». Afecta especialmente a partir de los segundos pisos, pero también hay casos en bajos. «Sábados e domingos (como hai máis xente en Ares) só podes ducharte a primeira hora da mañá ou ás 15.00 da tarde, ou agardar xa pola noite», indica Beatriz. Según los afectados, la problemática dura de julio a septiembre. Recuerdan desde el Concello que en octubre se firmó un convenio para mejorar el suministro entre Augas de Galicia (Xunta), Deputación da Coruña y administración local. «Nosotros ya compramos los terrenos para hacer depósitos de 3.000 metros cúbicos en Simou, tener agua acumulada y dar apoyo por las noches en momentos de consumo alto; enviamos toda la documentación a Augas de Galicia... pero van con retraso y aún no licitaron esta obra que es supramunicipal», indican.

Tuberías de más de 35 años

Apunta el alcalde Julio Iglesias otra problemática: «Nuestras tuberías son de hace 35 años y ya se crearon para atender entonces a 3.000 habitantes, ahora en verano son entre 15.000 y 18.000... además nosotros ampliamos la red hasta Os Castros y Seselle (con el rescate de un depósito de 800 metros cúbicos), a Caamouco (con un convenio con Fene para coger agua de Vilar de Colo), a Chanteiro y Cervás con otro depósito». En definitiva, «todos los vecinos tienen derecho a tener agua, el caudal se está repartiendo mucho».

Los afectados secundarán el jueves 15 una concentración ante el palacio consistorial. El año pasado se colocaron en las viviendas válvulas reductoras «e pensabamos que estaba solucionado pero este 2024 é peor, non sabemos quen é o responsable pero queremos solucións». Y son los primeros en indicar que «o aumento de poboación en verán en tremendo, queremos que veña xente pero non pode ser que para cociñar teñas que comprar garrafas xigantes no súper».

«Non pedimos un cohete para ir á lúa»

Desde el Concello recalcan que han invertido cinco millones de euros para mejorar la traída. Y se lamentan de que «vaya con retraso el proyecto de los depósitos que debe licitar Augas de Galicia». El convenio firmado entre las tres administraciones es por 3,4 millones de euros (el 40 % de Augas, 40 % de la Deputación y 20 % de aportación municipal). La administración local se encuentra aquí con una patata caliente derivada del gran crecimiento turístico y económico del municipio: no hay H2O para tanto grifo. El propio alcalde recalca que «comprendo la situación tan complicada por la que pasan los residentes en Ares, y que es fruto de dicho crecimiento».

Mientras tanto, vecinas como Beatriz Rico recuerdan que ««non pedimos un cohete para ir á lúa, só non ter que encher a bañeira para limpar o váter».» En algunas casas aseguran que no pueden encender el calentador durante gran parte del día porque la presión es insuficiente. Hay afectados desde en la calle Santa Bárbara a la calle dos Anxos o el paseo marítimo.

«Ansiedade e impotencia»

Otro ejemplo del día a día. La familia de Beatriz se despistó el festivo 25 de julio y no madrugó para ducharse: «Tíñamos unha comida pero como non podíamos bañarnos ata as 15.00 avisamos de chegar tarde; adecúas a túa vida social aos horarios da auga... e ao final é unha obsesión que causa ansiedade e impotencia». Los afectados presentaron reclamaciones al Concello para tener bonificaciones en las facturas del servicio, pero sin respuesta. Y admiten que «desexas que remate o verán para ter unha vida normal».