La gran colección del doctor libélula

Bea Abelairas
Bea abelairas FERROL

FERROL CIUDAD

JOSE PARDO

Un problema en un ojo le apartó de los quirófanos en el 2011 y desde entonces es un «paparazzi» de seres alados como los que se pueden ver desde hoy en la SGHN

03 ago 2017 . Actualizado a las 07:48 h.

Ramiro Segade Andrade cuenta con más de 100.000 imágenes de mariposas, gorriones y libélulas gallegas. Todas las ha disparado con su cámara, un modelo sencillo, sin potentes objetivos, que siempre lleva en sus paseos por senderos de toda Galicia. En la Sociedade Galega de Historia Natural (SGHN) se pueden ver desde hoy algunos de sus triunfos más preciados, los de las libélulas, los que más le encandilan: «Sus colores son preciosos y, además, no es fácil pillarlas cerca, pero cuando las veo me voy acercando con paciencia todo lo que puedo, porque la foto ideal es a dos metros, aunque no siempre puede ser», cuenta un médico que creció en Canido, muy cerca de la sede de la SGHN y que ayer descolgaba una exposición de mariposas para colocar en su lugar otra de libélulas.

A Ramiro también le fascinan las costumbres de esta especie: «¿Sabes que algunas crean la forma de un corazón cuando se aparean? Lo tengo en una foto», cuenta poco antes de ir a buscar una de las instantáneas tomadas en Doniños de una de las muchas que tiene nombre gallego: Cabaliño do Demo. De hecho, varios estudiosos, entre ellos el académico y poeta Darío Xohán Cabana, han elaborado un listado con los diferentes apelativos que tienen las especies gallegas: «Es que solo en Galicia tienen nombres especiales», apunta Paco, otro colaborador de la SGHN que ayer ayudaba a identificar los tipos de una especie que es muy sensible a la contaminación y por eso está desapareciendo. Algo que constata cada año Ramiro: en el 2011 tuvo que dejar los quirófanos por un problema en un ojo y comenzó entonces con su afición a pasear por espacios naturales y hacer fotos de los moradores alados más coloridos. «Cada vez hay menos y en lugares como Doniños había muchas y este año apenas se ven. Sucede lo mismo en Arcade, donde vivo, y que se llama Las Salinas, allí están desaparecieron todas y es donde más fotos hice al principio», detalla un médico que estudió la carrera con una beca de atletismo y que recuerda sus pinitos en las duras pistas de Ferrol. Inauguró el Marcide en el 1976, pero sobre todo ejerció entre Santiago y el Xeral de Vigo, porque su especialidad (cirugía pediátrica) no se ofrece en la ciudad.

Peleonas y tímidas

Aunque ha colgado la bata blanca la medicina está presente en la exposición: «Tengo un compañero que me ha enseñado los lugares y cómo hacer las fotografías. Él, que es un artista, me puso el nombre de doctor libélula y me gustó para la exposición», confiesa. En las paredes de la SGHN de Canido se podrá ver una lestes virens ferrolana o una anax imperator desovando y casi completamente doblada, además de la escena en cuatro imágenes de un aesna mixta bien colorido en plena llamada a una hembra que Ramiro presenció en Doniños.

«Son muy territoriales y extremadamente silenciosas, vuelan como los helicópteros y tienen visión de 360 grados, pero es cierto que unas son más dóciles que las otras y te dejan acercarte más», detalla Ramiro, que dedica muchas horas a sus paseos los días que no llueve, porque esas jornadas las libélulas se quedan en casa. «Por ejemplo la labor de la imperator es vigilar el territorio, pero a última hora de la tarde se cansan y se posan en algún lugar, aunque si aparece otra y se pelean es impresionante», sigue explicando un doctor que no descarta hacer de guía por sus fotos en las próximas semanas. «Me gusta darlas a conocer», apunta sobre un proyecto que se sufraga de su propio bolsillo y que seguirá llevando a cabo, a pesar de que ya ha reunido cerca de 100.000 imágenes de seres alados de los bosques gallegos.

La exposición se puede ver desde hoy en la Sociedade Galega de Historia Natural. Abierta todos los días de 10.00 a 14.00 horas, para visitas concertadas hay que llamar al 881931315.