Cuando se abrió el tramo hasta Fene ya había quejas por las 415 pesetas (2,49 euros) que costaba; ahora son 4,75
26 ene 2019 . Actualizado a las 05:00 h.El 24 de mayo de 1999 se celebró la inauguración del tramo entre Cabanas y Fene. En ese momento, las 415 pesetas (2,49 euros) que suponía el peaje desde Fene hasta A Coruña ya era «excesivas a juicio de numerosos usuarios», según publicó La Voz. Dos años antes, los empresarios de Ferrolterra ya estaban haciendo «un llamamiento para que se solicite la eliminación del peaje entre Ferrol y A Coruña, como ocurre entre otras ciudades que necesitan tener conexiones viarias rápidas que contribuyen a su desarrollo». Es decir, el cuento no ha cambiado mucho en las últimas dos décadas.
En la actualidad, la tarifa entre la urbe naval y la ciudad herculina asciende a 4,75 euros o, lo que es lo mismo, un 90 % más que en aquellos años. Basta con echar un vistazo a la evolución para confirmar que el encarecimiento ha sido constante -salvo una bajada simbólica- y, además, sangrante. El último, a pesar de las constantes quejas, el pasado 1 de enero. «No es un camino de rosas, es cierto, pero es lo que hay», rezaba otro reportaje de La Voz en el 2001, cuando el coste seguía siendo «excesivo», a la espera del último tramo gratuito hasta Ferrol, que se inauguró entre el 2003 y el 2004.
El primer gran salto en el precio se produjo pronto, el 1 de enero del 2002, cuando España tuvo que elevar el IVA de los peajes de las autopistas del tipo reducido (7 %) al normal (16 %). Detrás de esta situación estaba una sentencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea, que incrementó hasta los 2,87 euros -también se añadió el IPC- el trayecto entre Ferrol y A Coruña. Además, los redondeos por la entrada del euro crearon polémica al gravar al alza.
A partir de aquí, la tarifa fue aumentando entre 10 y 15 céntimos al año entre el 2003 y el 2012, salvo un inmovilismo en el 2010. Las subidas, siempre tomando como referencia los vehículos ligeros, fueron las siguientes: 2,96 euros (2003); 3,05 (2004); 3,15 (2005); 3,25 (2006); 3,35 (2007); 3,45 (2008); 3,60 (2009); 3,60 (2010); 3,70 (2011); y 3,85 (2012). Y fue en julio de este último año cuando se produjo un recordado incremento.
El Estado suprimió la compensación que venía abonando a las empresas concesionarias de autopistas desde el año 2000, cuando las ayudó a hacer frente a la pérdida de ingresos como consecuencia de la rebaja del 7 % de los peajes en 1999. Y esa decisión acabó repercutiendo en el bolsillo de los usuarios, que desde ese momento tuvieron que pagar 4,15 euros para ir de Ferrol a A Coruña. Dos meses después, en septiembre, el aumento se fue a los 4,25, y el inicio del nuevo año llevó el coste a los 4,35. Es decir, 50 céntimos en solo doce meses.
La autopista volvió a subir en el 2014 (4,45), se mantuvo al año siguiente, bajó por primera vez en el 2016 (4,40) y siguió así en el 2017. Sin embargo, el 2018 trajo consigo primero 10 céntimos más (4,50), y otros 5 en octubre (4,55), por diversas compensaciones a Audasa, que repercutieron aún más el primer día de este año (4,75). Y como ya han anunciado, el aumento no va a detenerse.