El racinguismo pide un último adiós a un Joselu que ya es leyenda

Carla Elías Martínez
Carla Elías FERROL

FERROL CIUDAD

Joselu celebrando su gol ante el Córdoba con el equipo
Joselu celebrando su gol ante el Córdoba con el equipo CESAR TOIMIL

El capitán: «Agradezco muchísimo el cariño de la gente, me ayuda a llevar este momento»

25 may 2023 . Actualizado a las 23:07 h.

«En 2014 llegaste a Ferrol para sorpresa de todos. Nueve años después, ya formas parte de nuestro escudo. Puede que el sábado toque despedirnos, pero nos dejaremos la piel por dejar al Racing donde siempre has deseado este tiempo. Pase lo que pase, eternamente agradecidos, capitán». Con este emotivo mensaje acompañado de un vídeo sobre su historia, la Peña D'Tapas lanzaba un clamor unísono del racinguismo: un último adiós a Joselu este sábado en el importantísimo encuentro frente al Celta B. «Que le den algún minuto al final», «que caliente en el minuto 22» o «que el club retire su dorsal» son algunas de las propuestas de los aficionados para homenajear a una leyenda racinguista, el máximo artillero del club con 119 dianas históricas.

«Es muy bonito que, en estos momentos, que son muy buenos para el equipo aunque un poco complicados individualmente por no poder estar con todos, la gente tenga este cariño y lo pida», agradece el delantero. Aunque está alejado de las redes sociales, reconoce que ha visto esta campaña de los aficionados: «Mis compañeros me cuentan. Y lo noto por la calle. La gente me muestra mucho cariño y me lo pide. Da gusto recibir tanto apoyo en un momento complicado» comenta. También lo notó en el martes, durante la larga cola para la venta de entradas. «Pasé por allí y me lo dijeron. Pero como en muchos momentos durante el año. Me ayudan a llevar este momento complicado de la mejor manera. Lo importante es que el equipo gane», incide.

Desde que se conoció el alcance de su grave lesión, el minuto 22 de los últimos partidos del Racing se dedica al capitán. «Ese cariño es algo que creo que a todo jugador le gustaría vivir. Solo puedo dar las gracias a la gente porque se llevan mucho mejor los partidos desde la grada con esos momentos», indica. Y, en especial, los gestos de la grada en Talavera. «Durante el partido y al terminar se acordaron de mí. Son cosas que gustan después de tantos años aquí, que la gente me valore», agradece.

Llega la gran batalla, el partido que espera desde que fichó hace nueve años. «Me encantaría jugar. Es el partido que soñé desde que vine aquí, pero las circunstancias son las que son y hay que aceptarlas», reconoce. Trata de analizar el momento «con un poco de frialdad» para ayudar a los compañeros «en esta situación, que es importante». Como capitán, al vestuario le recuerda que firmarían «por estar a estas alturas en la situación que estamos». «Hay que jugar con la tranquilidad de saber que nuestra temporada está siendo increíble, lo que todos deseábamos, ya lo tenemos. Y ahora es un pasito más para tener el mayor premio a todo el trabajo», exclama. Y un consejo: «Que lo disfruten». «Va a haber un ambiente como probablemente no se haya vivido nunca aquí. Ellos son los que se lo han ganado, los que merecen este momento y tienen que disfrutarlo», incide.

No tiene dudas de que el Racing es superior al Celta B, pero toca «demostrarlo». «Hay que dar el máximo para poder conseguir el ascenso. Un día más volviendo a hacer lo que llevamos haciendo toda la temporada. Y tener también en la recámara la idea de que si no se consigue, que evidentemente es un posibilidad, centrarnos en el siguiente partido. Nadie quiere que pase, ni creo que vaya a pasar, pero puede pasar», reflexiona. Por ello, su última petición es a la afición: «Que convierta A Malata en una caldera. Que apriete lo máximo posible».

La lesión

El camino de Joselu este curso no ha sido nada fácil. Una lesión crónica en la rodilla le obligó a decir basta a mediados de temporada. La última vez que pisó un terreno de juego fue en domingo 5 de febrero en el empate matinal ante La Cultural Leonesa. Aunque ahí ya estaba tocado y solo pudo aguantar cinco minutos. «Llevaba ya tres partidos sin jugar, estaba en el banquillo y el míster me sacó al final de todo», recuerda. Su último encuentro regular se remonta a enero en la victoria por 3-0 ante el Sanse.