Manuela del Pilar Santos, decana de la Facultad de Humanidades: «Ferrol y la universidad deben avanzar juntos»

Afirma Manuela del Pilar Santos, la decana de la Facultad de Humanidades, que «Ferrol y la universidad tendrán un gran futuro». Pero que ese futuro pasa, inexcusablemente, por estrechar los lazos entre la ciudad y el campus. «Está claro que el mundo universitario —dice la decana— tiene que abrirse más a la sociedad, a toda la ciudadanía. Pero también es imprescindible que Ferrol reivindique, de manera decidida, su vocación de ciudad universitaria y de ciudad cultural. Estoy convencida —añade— de que el camino es ese. Porque Ferrol y la universidad deben avanzar juntos, ir juntos. Y yo, por mi parte, haré todo cuanto esté en mi mano, sin regatear esfuerzos, para lograr que las puertas se abran todavía más en ambas direcciones».

La Facultad de Humanidades de Ferrol vio desaparecer, en su momento, la titulación que le daba nombre. Pero hoy, como Manuela del Pilar recuerda, en sus aulas se forman futuros graduados en Relaciones Internacionales, en Gestión Industrial de la Moda y en Gestión Digital de la Información y la Documentación; y, además, en la facultad también se imparte un máster en Museos, Archivos y Bibliotecas.

Más allá de las aulas

Más allá del ámbito estrictamente docente, la decana de la Facultad de Humanidades de Ferrol quiere que «la ciudadanía de toda la comarca encuentre en el campus un espacio de referencia, un lugar que invita a avanzar por los caminos del conocimiento, de la creatividad y del pensamiento crítico».

En este sentido, explica que a medio plazo quiere poner en marcha un proyecto destinado a hacer de la facultad uno de los principales focos de actividad cultural de Ferrol, mediante iniciativas destinadas a ciudadanos de todos los perfiles. Una idea que nace con la vocación de aprovechar los recursos de la universidad (desde sus infraestructuras hasta su capacidad investigadora y el conocimiento atesorado) para «tender puentes» con un Ferrol que —dice la decana— «no siempre ha reivindicado su patrimonio cultural con la intensidad necesaria».

Procedente del mundo del Derecho, Manuela del Pilar Santos subraya la necesidad no perder nunca de vista la realidad de los días. Apuesta por vivir con los ojos muy abiertos en una época en la que los cambios son constantes... e imprevisibles. Presidenta de la Asociación de Decanatos de Centros Universitarios con titulaciones en Artes y Humanidades (ADEAH), dice que «si no conoces al historia, o si prescindes de la filosofía y de la ética, navegas sin rumbo».

«Para que la sociedad mejore, es imprescindible saber analizar lo que nos rodea»

El hecho de que el Campus Industrial de Ferrol tenga, por su propia naturaleza, un carácter decididamente tecnológico, no le resta relevancia alguna, dice Manuela del Pilar, a la presencia de las humanidades. «¡Todo lo contrario...!», exclama. «Desde que llegué al decanato —dice— me he marcado el objetivo de hacer todo cuanto esté en mi mano para lograr que el campus ferrolano siga siendo un espacio académico en el que estén muy presentes desde la filosofía, la antropología y la historia hasta, por citar solo dos ejemplos más, las artes y la ética; y creo —añade— que, entre todos, lo hemos conseguido. Circunstancia —anota— que por supuesto hace que me sienta inmensamente agradecida a cuantos nos han ayudado a avanzar en esta dirección».

«Para que la sociedad mejore —apunta, también, Manuela del Pilar Santos— es imprescindible saber analizar lo que nos rodea. Y eso requiere, en primer lugar, tiempo —comenta—. Pero lo que precisa, ante todo, y permítaseme insistir en ello, es sentido crítico y capacidad de reflexión».

Sobre el tejido empresarial

De cara al futuro de Ferrol, dice Manuela del Pilar, es imprescindible que la ciudad y toda su comarca puedan contar con una economía sólida que les permita seguir avanzando. Cosa que, como a nadie se le escapa, precisa de un tejido empresarial sólido. «Pero también es importante —comenta la decana— que nos preguntemos cómo son las empresas que queremos tener».

Manuela del Pilar sostiene que «una sociedad más culta siempre es una sociedad más libre y, en consecuencia, una sociedad más justa; una sociedad —concluye— decididamente mejor».

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