Adiós a los esqueletos de la crisis: «Se vendió hasta un edificio de Narón de 80 pisos por menos de un millón»
NARÓN
En la ría se liquidaron casi todos los edificios, «en el futuro se doblarán los precios»; en el caso del inmueble de Freixeiro, un promotor lo adquirió para comercializar esas casi cien viviendas
05 oct 2025 . Actualizado a las 05:00 h.Aquel paisaje de edificios fantasma rozando el cielo de la comarca empieza a convertirse en historia. Casi todos los esqueletos de la crisis en la ría se han vendido, están apalabrados o en negociaciones para su reconstrucción. Según Cisbar, la comercializadora de activos financieros, «de los 20 inmuebles que quedaban en el mercado en Ferrolterra, Eume y Ortegal... ahora solo hay tres, en Mugardos, Cariño y Ortigueira». El gigantesco de Valdoviño no está en comercialización. Y entre las últimas grandes ventas, destaca el edificio de la calle San Lucas en Narón por menos de un millón de euros. Ya está en manos de un nuevo promotor, que podrá comercializar sus 80 pisos.
Desde Cisbar, Laura García indica que todos estos bloques «proceden de la crisis de 2008 cuando los bancos los sacaban a precios desorbitados, y no recobraron el interés hasta hace tres años». Desde 2022, se han combinado la escasez de vivienda (la Sareb ya las sacó del mercado), la bajada de precios y la falta de oferta en alquiler. Y los promotores se lanzaron a los esqueletos, que se encontraban a la mitad de precio que hace veinte años.
El especial caso naronés
En Narón, municipio que sufrió especialmente el estallido de la burbuja inmobiliaria, se observa este fenómeno. La propia alcaldesa, Marián Ferreiro, indica que «este concello estase movendo moito a nivel inmobiliario, edificios abandonados ou a medio facer recupéranse». Algunos promotores ya han presentado solicitudes de licencias en la administración local, y otros han mostrado su interés. Añade Laura García (Cisbar), que «los promotores en los últimos años vieron el negocio, compran una obra que se encuentra al 50 % o incluso alguna al 90 %, la arreglan y venden».
Esta gestora comercializa precisamente viviendas de este tipo: «Si partes de cero puedes tardar tres años en hacer los pisos, pero cuando ya está el edificio medio construido en menos de un año lo tienes listo, con menos coste y las viviendas son la mitad de baratas para el particular». ¿Qué pasará a partir de ahora? Indica Laura García que «el suelo se convertirá en protagonista, porque ya no quedarán edificios de este tipo, habrá que apostar por la construcción desde cero y se doblarán los precios».
El protocolo para relanzar los esqueletos dosmileros es el siguiente. Los empresarios empiezan arreglando un piso piloto, lo usan para mostrar a los clientes y el resto ya se vende sobre plano, al rápido ritmo de seis o como mucho doce meses. «Y estos esqueletos tienen mucho éxito porque casi no queda vivienda, muchos inversores llegan de fuera de Galicia a comprarla más cara que hace tres años con el objetivo de alquilarla», asegura Laura García.
Listas de espera de promotores
Los promotores incluso se asocian para construir y así asumir menos riesgo. Gestoras como Cisbar llegan a tener listas de espera con estos clientes, «una cartera de promotores que piden más viviendas de este tipo, las llamadas WIP o Work in Process (porque están a medio terminar)». Si Cisbar contaba antes con 60 esqueletos en la provincia, «ahora no nos queda prácticamente nada». Vuelve a llamar la atención el caso de Narón, «aquí se construyó una gran cantidad de edificios y después la crisis les afectó un montón; Las Torres fueron el primer ejemplo de recuperación, la Sareb las acabó y vendió todo salvo dos bloques que se están acondicionando».
Este municipio consiguió así vender bloques como los que se encontraban en la calle Italia o la citada San Lucas, este último llegó a tener a varios interesados en el último tiempo. Las compras también se multiplicaron por Ferrol y Neda, con casos tan emblemáticos como el de la carretera de Catabois que ahora ofrece 41 pisos.
Inversores que llegan desde las Baleares para dedicar inmuebles al alquiler
En Ferrolterra desembarcan inversores llegados de las Baleares, que antes se dedicaban a la promoción inmobiliaria en sus islas y ahora buscan el norte. «Sigue viniendo gente de Ibiza y Mallorca para invertir», apunta Laura García de Cisbar, «sobre todo porque aquí hay mucha demanda de alquiler que hay que aprovechar».
Recalca la alcaldesa Marián Ferreiro que «en Narón cada vez hai menos vivenda, acabamos de gañar 662 novos veciños que entendemos que chegan polas boas condicións de traballo nos polígonos; pero a oferta habitacional é cada vez menor, por iso é bo que se retomen os edificios da crise». Cita además otro proyecto como la construcción de viviendas de protección oficial a cargo de la Xunta en un terreno cedido por el Concello.
Desde Cisbar apuntan que «ahora es buena época para comprar, porque los precios de los edificios bajaron; el caso del inmueble de San Lucas supone una alegría no solo para los vecinos sino para los que buscan un hogar». Toda esta zona «tiene mucho tirón, en A Coruña el mercado parece más tensionado y se recurre a Ferrolterra».