Mercedes Ana Vidal, belenista ferrolana: «Me pasé la vida pensando en el belén, incluso en la playa en verano»

Gala Dacosta Diehl FERROL / LA VOZ

ORTIGUEIRA

La belenista Mercedes Ana lleva desde el 2020 sin montar su emblemático nacimiento.
La belenista Mercedes Ana lleva desde el 2020 sin montar su emblemático nacimiento. JOSE PARDO

Hasta enero, abren en la provincia al público varios nacimientos que vale la pena visitar

05 dic 2022 . Actualizado a las 18:30 h.

 A Mercedes Ana Vidal le viene el amor por los belenes de muy pequeña, porque ya su madre montaba en casa un nacimiento de ambiente gallego, en lugar de hacerlo oriental como sería lo propio. Cuando se casó y se marchó a vivir por su cuenta, decidió seguir con la invención familiar de su madre. Ahora, a sus 75 años, a la creadora del famoso belén naíf de Ferrol solo le hacen falta más manos para volver a mostrarlo al público, y algún bajo libre que le quieran ceder.

—¿Cómo empezó a montar su ya famoso belén?

—Empecé a hacerlo en casa, sobre una cómoda. Conforme fui añadiendo más piezas, lo pasé a una mesa, y después a un tablón grande de madera. Cuando viajaba por España compraba figuritas de barro y luego las pintaba yo misma. Siempre lo hice como yo podía y con lo que estaba a mi alcance. Fui añadiendo poco a poco con los años y llegué a tener más de quinientas. La última vez que lo monté lo puse sobre un tablón que pasa de los cuarenta metros de largo. En el nacimiento hay arena de todas las playas de Ferrolterra, como Cabanas, Valdoviño o Doniños, y cuando fue el Prestige fui a Chanteiro a por chapapote. Lo metí en un táper y después lo usé en el belén para rendir homenaje a los voluntarios que limpiaron las playas gallegas.

—¿Por qué a la gente le gusta tanto su nacimiento?

—Yo lo hacía para mi casa, así que no era consciente. Mis amigas me animaron a abrirlo al público y fue un éxito tan grande la primera vez que lo expuse, en un bajo de la calle Galiano, que pasaron por allí miles de personas. No podía dar crédito. Desde entonces repetí unas ocho veces, la última en el Casino en 2020, que me invitó la propia dirección. Yo creo que tiene muchas cosas representativas de Ferrol, que son nuestras. Además es muy didáctico: hasta las escuelas llevaban a los niños a ver el nacimiento, y yo misma les iba explicando por qué tiene todas las playas de Ferrolterra, así como motivos de otras provincias, y también incorporé el Camino Inglés, que acaba en Santiago de Compostela, por supuesto.

—¿Cuál es la parte más complicada de montar una exposición como la suya?

—Es bastante trabajoso. Si quisiera tenerlo listo para esta Navidad, en noviembre tendría que empezar a montarlo. Ahora que voy mayor, me da mucha pena tenerlo guardado. Mis hijos trabajan y no pueden montarlo y no quiero que desaparezca, me gustaría donarlo a alguna entidad benéfica. Ya lo monté en Cáritas y en la Cocina Económica hace años. Me daría muchísima pena no volver a ponerlo nunca más. Cuando lo abrí al público por última vez tuve que venir a vivir a Ferrol durante un tiempo para ir poco a poco poniéndolo en el Casino. Me pasé la vida entera pensando en mi belén, incluso en verano cuando paseaba por la playa. Encontraba palos o piedras y pensaba a ver si valían para ponerlos en el belén, sola o con mis hijos. En Navidad me ayudaban a separar los muebles del salón para el belén, y una vez se casaron lo saqué de casa.

Los belenes de interés artístico de la provincia de A Coruña vuelven por Navidad

No hay que desplazarse hasta demasiado lejos para disfrutar de algunos de los belenes más pintorescos de Galicia. Es el caso del nacimiento artesanal de San Fiz de Solovio, situado en pleno casco histórico de la ciudad de Santiago de Compostela, que cada Navidad visitan decenas de miles de personas. También es el caso del belén montado en el convento de San Francisco, en la zona vieja de la urbe; o del que se exhibe en el colegio de la Gran Obra de Atocha, que fue inaugurado por el ferrolano Camilo Díaz Baliño en las Navidades del año 1927. El multidisciplinar artista elaboró otro nacimiento todavía más antiguo, el que se encuentra en Santa Marta de Ortigueira, que abrió al público por primera vez en el año 1923, y está a punto de cumplir un siglo de existencia.

Detalle del nacimiento que se puede ver en San Fiz
Detalle del nacimiento que se puede ver en San Fiz PACO RODRÍGUEZ

Un trabajo minucioso

Más allá del valor y el significado religioso de los belenes, las anteriores son minuciosas obras de artesanía. Aunque los más famosos son los italianos, concretamente los del sur del país, de la bahía de Nápoles, hace por lo menos tres siglos que son algo común en distintos puntos del territorio de España. Se instauró a partir del siglo XVIII la tradición de reproducir el portal de Belén en miniatura con figuras. Las de barro fabricadas en Cataluña, según la investigadora Iria Rivera, eran muy cotizadas: tanto los belenistas profesionales como los aficionados de toda España las encargaban allí.

El nacimiento de Santa Marta de Ortigueira requiere de un cuidado especial. El clérigo de la parroquia, Francisco Javier Martínez, lleva montándolo desde el pasado 1 de diciembre: «O 23 é a inauguración, estamos traballando nel lentamente, dado que se atopa delicado polos anos e non queremos danar a montaxe». Ese día, a las siete de la tarde, habrá una actuación de la Coral Polifónica de Ortigueira, tras la eucaristía e inauguración del nacimiento, que cumple 99 años.

El nacimiento centenario de Ortigueira o la última faceta de Camilo Díaz Baliño

El nacimiento de Santa Marta de Ortigueira celebra su 99 aniversario.
El nacimiento de Santa Marta de Ortigueira celebra su 99 aniversario.

Camilo Díaz Baliño (Ferrol, 1889) es una figura histórica de la Galicia Contemporánea por su faceta de intelectual galleguista y por su importante obra gráfica, artística y literaria. También por ser el padre de Isaac Díaz Pardo, artista con tantos matices y talentos como su progenitor, y fundador de la mítica fábrica de Sargadelos. Pero una parte menos reconocida de Díaz Baliño fue su afición por los belenes. Creó dos que se exhiben cada año en la provincia y que merece la pena conservar: el de Ortigueira y el de A Coruña.

Ilustrar la Galicia de Pondal

En 2023, el nacimiento de Santa Marta de Ortigueira festejará su centenario. Fue concebido y creado por el propio Díaz Baliño. La investigadora Iria Rivera, gran experta en Díaz Baliño, señala que todas sus obras eran artesanales. «Era un mestre», asevera. En el caso de Ortigueira, no se trata de un belén al uso, puesto que su creador fue el introductor de la temática popular gallega en el arte, el primero que supo ilustrar la Galicia imaginada por Pondal. En el nacimiento, el paisaje es el del entorno de la comarca de Ortegal, en un intento del artista por acercar la escena al público de la zona.