¿Quién da de baja una tarjeta? ¿El cliente, en un acto de ordenación de la economía doméstica, o el banco, cuando detecta que el usuario se ha quedado sin unos ingresos regulares? «Es raro que sea el banco el que lo haga. El primero en reaccionar ese el cliente, sobre todo cuando sabe que por no utilizarla se le va a cargar una comisión», agregan fuentes financieras. Los casos en los que un banco tiene que dar el paso son más infrecuentes, y obedecen en la mayoría de los casos a una situación de ya declarada morosidad. La tarjeta, entonces, es solo uno de los problemas que puede dejar a la entidad ese cliente.
Con todo, en las últimas semanas se han producido en varias entidades españolas una táctica para estimular el consumo, vinculado a la campaña de Navidad y al inicio de las rebajas. Consiste en aplicar descuentos por compras que se abonen con tarjetas, como hace Novagalicia. Pastor, Bankia, Banesto, Caja España o Cajamar. También ofrecen sorteos por compras.