La coordinadora de Educación Vial de la DGT en la provincia de Pontevedra, Helena Rodríguez, estuvo ayer en el hospital Fátima para hablar de las jornadas para sensibilizar a 2.000 escolares vigueses. «Las tasas de mortalidad en la provincia han descendido pero en enero del 2011 no hubo ningún fallecido de tráfico y este año, suman cuatro. Hay que estar vigilantes hasta que el riesgo sea cero», dijo. Y da una nota positiva: el 97% de los motoristas usan casco.
-¿Cómo ven la situación de la educación vial en Vigo?
-Desde hace tiempo, cuatro agentes de la Policía Local que están dirigidos por oficiales imparten charlas a escolares de primaria y secundaria. También desarrollan un programa específico y novedoso con embarazadas y discapacitados.
-¿Y los resultados?
-En general, los esfuerzos dan sus frutos pero hay que seguir en la misma línea. Si alguno se salta una norma o comete una imprudencia es porque no tiene formación suficiente. Es difícil tener cero accidentes.
-¿Cómo es el nivel de Vigo?
-Aquí trabajan duramente y abarcan muchos temas. A nivel nacional, recientemente hubo una puesta en común en seguridad vial y quedó claro que Vigo está presente. La población es numerosa y la ciudad abarca una gran extensión pero los esfuerzos también son grandes, tanto laborales como los implicados en estos programas. Vigo está en una línea inmejorable.
-¿Y respecto a los menores?
-Colaboramos con la Fiscalía de Menores para formar a los implicados en accidentes que están en esas edades.
-¿Si hubiese más charlas habría menos accidentes?
-Esto es un resultado a largo plazo y que es incuantificable, no se puede decir que con 5 charlas más habría un accidente menos.