Tras una primera ronda informativa, ahora sancionará a los infractores
10 jul 2012 . Actualizado a las 07:00 h.El Ayuntamiento cuenta con una ordenanza reguladora de los vertidos a la red de alcantarillado desde marzo de 2010. En virtud de la citada normativa, ha llevado a cabo, desde finales del año indicado, una labor de control de empresas, por actividades, con el fin de recoger datos e informar de las obligaciones a las que están sometidas. El concejal delegado del alcalde para Medio Ambiente, Lino González, anuncia una segunda ronda, esta vez de inspección y aplicación de las correspondientes sanciones en caso de incumplimiento.
Desde finales del 2010, el personal municipal visitó más de 200 empresas lucenses que están obligados a atenerse a la ordenanza de vertidos a la red de alcantarillado, como son, por citar algunas, las tintorerías y las que se dedican a realizar cromados. En esa primera ronda, los enviados municipales informaron de las obligaciones de los industriales. Tras las vacaciones de verano empezará una segunda vuelta, en la que comprobarán que las industrias realmente cumplan las obligaciones. El concejal de Medio Ambiente, Lino González Dopeso, señala que la información recabada por el Ayuntamiento será de gran utilidad en los casos en los que se detecte la presencia de vertidos contaminantes, ya que, por el tipo de que se trate, será posible localizar el origen con relativa facilidad.
Equipo
Las visitas a las empresas las realizarán una funcionaria del departamento municipal de Medio Ambiente, un agente de la Policía Local y un trabajador de la empresa que gestiona la estación depuradora de aguas residuales, que será el encargado de la toma de muestras.
El mismo edil indica que en la normativa se establece a partir de qué valores no es autorizable el vertido de aguas residuales a la red de alcantarillado.
De acuerdo con lo previsto en la ordenanza municipal, los titulares de las empresas revisadas habrán de facilitar el acceso de los inspectores y están obligados también a facilitar la documentación necesaria. En la misma normativa se indica que el Ayuntamiento podrá efectuar las inspecciones cuando lo estime conveniente; los inspectores deberán estar debidamente acreditados, mediante documentación expedida por el Ayuntamiento, y podrán ir acompañados de personal externo para los trabajos auxiliares, como la toma de muestras.
La ordenanza municipal seguramente tendrá que ser modificada cuando la Xunta apruebe y entren en vigor las nuevas disposiciones autonómicas en materia de vertidos.
Por otro lado, el mismo concejal lucense apunta que el Ayuntamiento sopesará también la posibilidad de revisar la citada normativa municipal en relación con los vertidos hospitalarios; es una tarea aún no iniciada, pero sobre la que se reflexiona en el Ayuntamiento.