El contrato del servicio de la grúa, objetivo preferente de la jueza De Lara
21 abr 2013 . Actualizado a las 07:00 h.La empresa Cechalva, con casi toda su nómina de directivos responsables imputados, es en la actualidad una de las más atractivas para la jueza dentro de la operación Pokémon. La justicia acecha a esta firma que consiguió el contrato del servicio de grúa en el Concello de Lugo, supuestamente a golpe de sobre. Uno de sus fundadores no dudó en decirle a la jueza que daba un sueldo mensual de 2.000 euros al mes al exconcejal Fernández Liñares. En el fragor de la batalla por conseguir pruebas, los investigadores sospechan que el que era brazo derecho del alcalde de Lugo, repartía dicha cantidad. Esta semana, los agentes de la jueza de Lara anduvieron por el consistorio en busca de documentos. A continuación se ofrecen algunas claves para entender qué es y cómo funcionaba Cechalva.
Como nació
En Oviedo. Cechalva fue una empresa creada en Asturias. Empezó a operar con dos administradores: Jorge Cechini y José Luis Álvarez, ambos imputados. (Cechalva es la fusión de los apellidos Cechini y Álvarez)
En 1996 lograron el contrato de la grúa en la capital del Principado hasta el 2005. El servicio prestado en esa ciudad estuvo rodeado de multitud de polémicas. Durante seis años retiraban un coche cada 22 minutos. Concejales de la oposición ovetense habían denunciado el elevado coste del servicio para las arcas municipales. El precio por vehículo retirado creció más de un 30%. El enfrentamiento llegó a ser una guerra abierta entre ayuntamiento y empresa hasta el extremo de que el primero ordenó rescindir el acuerdo de venta a Cechalva de una parcela de 1.747 metros. Supuestamente vendió el solar a una empresa de Ponferrada, pese a tenerlo prohibido en la escritura de adquisición,
la llegada a Lugo
La llamada de Santiso. Los fundadores de la empresa cuentan que el desembarco en Lugo se produjo después de que el empresario lucense Manuel Santiso les propusiese trasladar el modelo de negocio. Uno de los imputados le dijo a la jueza que, cuando empezaron los contactos, ya les indicaron que en Lugo tenían un 99 por ciento de posibilidades de quedarse con la adjudicación. Finalmente, fueron colocados en el organigrama de la empresa Manuel Santiso y Demetrio Arias. Este último, de ganadero pasó a administrador. Arias es cuñado de otro de los imputados en la Pokémon, Javier Reguera, responsable de la Ora. La rama asturiana de Cechalva cree que este movía muchos hilos en la empresa de la grúa. Los movimientos realizados en una notaria, a finales de agosto de 2006, son curiosos.
el contrato
484.000 euros. A principios de noviembre de 2005, la mesa de contratación eligió a Cechalva como la adjudicataria del servicio de la grúa municipal hasta el 2015. Quedaba fuera de juego Aparkisa, que también se ocupaba de la gestión de los aparcamientos Ora. Para optar al concurso se presentaron cuatro empresas. Una de ellas quedó fuera porque no reunía los requisitos exigidos en las bases. La adjudicación fue realizada por 484.000 euros. Por aquel entonces quien había llevado la voz cantante a la hora de dar explicaciones a los medios había sido el edil delegado del alcalde para Economía, Fernández Liñares. Recordó que con el nuevo contrato aumentarían las prestaciones del servicio porque habría grúa operativa las 24 horas del día. Además, la empresa tendría disponible una plataforma para la retirada de vehículos pesados.
ilegalidades
Sin licencia. El apetecible contrato conseguido en Lugo motivó que Cechalva cambiase Asturias por O Ceao. Todo apunta que comenzó a funcionar ilegalmente. Parece que había prisas. La adjudicación fue a primeros de noviembre de 2005 y el inicio de la prestación del servicio, al mes siguiente. El arranque meteórico parece que fue sin ningún tipo de licencia. Los investigadores buscaron esta semana en el concello documentos para saber si le fue dada la licencia de instalación. Durante cuatro años, al parecer, Cechalva operó sin tener todos los papeles en regla y con advertencias de Industria para corregir una serie de deficiencias detectadas previamente.
crónica operación pokémon