El Concello de Ourense vive en una crispación permanente y al popular Guillermo Collarte debe reconocérsele el mérito de haber conseguido poner de acuerdo a todos los grupos. Todos sin excepción le dedicaron ayer palabras cariñosas en su despedida del Ayuntamiento, anunciada un día antes. La concejala de Urbanismo, Áurea Soto, con quien tuvo más contacto por la elaboración del PXOM, utilizó para ello su primera intervención, pero tras el discurso de Collarte tanto Gonzalo Pérez Jácome (DO), como Xosé Somoza (BNG), Rosendo Fernández (PP) y el alcalde, Agustín Fernández, tomaron la palabra para desearle suerte y para destacar su carácter conciliador. Él lo demostró una vez más en su despedida, en la que dijo que su sustituto -que será el exconcejal José Araújo- lo hará «infinitamente mellor» que él. Avanzó que, por «afecto» y por su condición de diputado no romperá sus vínculos con Ourense. Se emocionó al recordar a su padre y terminó su intervención reiterando sus disculpas por decir, hace un año, que las pasaba «canutas» con 5.100 euros al mes.