Al menos otros cinco vecinos pernoctan en vehículos en A Coruña
26 sep 2013 . Actualizado a las 07:00 h.En la mesilla de noche, al lado de la cama bien arreglada, un diccionario de español, un libro de Caballero Bonald y otro de Tolkien. Al lado, en un estante, unas figuras decorando. Cerca descansa una bicicleta. Podría sera una habitación de cualquier piso. Pero es el mobiliario que se puede ver, a la intemperie, en un portal.
La curiosa vivienda está a escasos 300 metros del noble palacio de María Pita, resguardada en los pequeños soportales de la calle de los Ángeles, en la entrada a la Ciudad Vieja. «Flores para sobrevivir», reza un cartel pegado a una silla, muy cerca de la cama, montada sobre cartones bien alineados. Quien las vende, seguro, no lo tiene fácil.
El pisito al aire libre en la calle de los Ángeles es, seguramente, el alojamiento más extraño de los que emplean los sin techo que viven en la ciudad. No es la única persona en A Coruña que pasa las noches al raso.
La Concejalía de Servicios Sociales le ha puesto número. Según los últimos datos del equipo de inclusión social, están localizadas 48 personas pernoctando de forma habitual en la vía pública.
El Ayuntamiento tiene, además, contabilizados otros cinco vecinos que pasan las noches en algún tipo de vehículo y otros ocho que lo hacen en casas deshabitadas.
Los que antes buscaban cobijo en los cajeros han ampliado su red de domicilios. Las tiendas que se llevó por delante la crisis se han convertido también en habitaciones más o menos improvisadas. No es difícil ver a más de uno tumbado en la entrada de alguno de los negocios cerrados de San Andrés, por ejemplo. Muchos recogen los bártulos por la mañana, y otros, como en el caso de la calle de los Ángeles, los tienen instalados de modo permanente.
El Ayuntamiento ofrece un servicio de ayuda, en coordinación con la Cruz Roja, que se encarga también de mantener un censo actualizado de personas sin techo. Lo hacen a través de denuncias ciudadanas, de informes de la Policía Local o de las giras de observación del Servicio Municipal de Emergencias Sociales.
La atención en la calle se intensifica en A Coruña en los días en los que se registran condiciones climatológicas especialmente adversas y en horario nocturno, cuando ese colectivo corre mayor riesgo.
El Ayuntamiento tiene firmados diversos convenios con entidades como el albergue Padre Rubinos, la Cocina Económica, Cáritas o la Cruz Roja. Esta última entidad aporta dos técnicos propios y varios voluntarios al equipo en el que también están cuatro técnicas municipales.
Además de ofrecer ayuda de urgencia, como alojamientos alternativos, ropa de abrigo y víveres, ofrece atención personal a través del centro ubicado en Monte Alto. Atiende a quienes quieren acudir, algo que no siempre es fácil conseguir en ese colectivo.