La oferta de vivienda, los edificios «fuera de ordenación» y el rural centraron el debate
06 mar 2014 . Actualizado a las 06:00 h.«Normalmente un plan general es qué hay de lo mío, y en Galicia más. Eso es normal, pero lo que no puede hurtarse es el debate sobre ¿qué hay de lo nuestro en el PXOM?». La reflexión es de Áurea Soto, concejala de Urbanismo, que fue entrando en debate sobre los temas más calientes que ha dejado la multitudinaria exposición pública de tres meses en la antigua sede del Banco de España, en plena calle del Paseo. «En otro sitio la gente iría a ver solo el plan general. Aquí al estar en la gran plaza pública de Ourense vino más gente y era importante que se viese la futura ciudad», aseveró la edila de Urbanismo.
vivienda nueva
Seis mil de diferencia. 19.000 o 25.000. Ese es el debate sobre el que ha girado la planificación de vivienda para el nuevo plan. Constructores y Concello no se han puesto de acuerdo, aunque ambas partes coinciden en que seguirán negociando una vez concluido el período de alegaciones. «No nos olvidemos nunca de que tenemos 15.000 viviendas vacías que tenemos que mantener entre todos con sus gastos. Eso es así por una hipertrofia que ya no tenemos que discutir. 19.000 nuevas casas parece más que razonable», argumentó Áurea Soto. Al otro lado de la balanza, constructores y empresarios piden que se eleve la cifra hasta 25.000. «Es bueno tener oferta de suelo para evitar que los precios se tensen», alegó Alfredo Cerezales, asesor de CEO, ACO y Cámara de Comercio.
fuera de ordenación
¿Campaña o realidad? El término «fuera de ordenación» fue uno de los grandes animadores del período de alegaciones al PXOM. El documento establece que miles de viviendas se quedarían en esta situación. La oposición política hizo saltar las alarmas y el pleno municipal aprobó un acuerdo para evitar que los inmuebles quedasen en esta situación. Para Áurea Soto hubo mucho de campaña interesada por parte del PP: «Nunca fue un problema». No compartió esa opinión Eligio Nieto, presidente de los constructores: «Hay una psicosis con eso. Lo que está claro es que si vas a pedir un crédito para un piso fuera de ordenación no te lo dan y si vas a venderlo te pierde valor. Hay un problema, pero nosotros confiamos en la palabra de la concejala de que lo va a solucionar»
Restricciones en el rural
Malestar vecinal. «El plan es muy restrictivo en el rural. Reduce mucho las zonas para edificar y hacía falta facilitar un poco la construcción», asegura Manuel Carnero, presidente de Limiar. La edila de Urbanismo no descarta abrir un poco la mano en ese sentido, aunque «siempre dentro de lo que establece la normativa». En todo caso desde Limiar, a través de su asesor Eladio Fernández, contraatacan: «A ver si por dirigir demasiado se provoca que la ciudad no crezca y lo hagan los ayuntamientos limítrofes, como ya sucedió con Barbadás, Pereiro o San Cibrao. No es normal que haya bolsas de terreno vacío en Marcelo Macías y al lado en Barbadás se hiciesen 7.000 nuevas en los últimos años». Para cerrar el debate, Soto indicó: «Con el plan del 2003 se hicieron todas las casas que se quisieron».
suelo industrial
Escasez. Los empresarios ourensanos creen que el suelo industrial previsto es escaso y alguno del que se incluye es difícilmente desarrollable: «Tienen unas edificabilidades bajas, lo que hace que la mayor parte de ellos sean inviables», concluyó Alfredo Cerezales.
proyectos de ciudad
AVE y termalismo, a la cabeza. Entre los proyectos de ciudad que recoge el PXOM, Áurea Soto destacó por su relevancia la llegada de la alta velocidad con la reordenación del barrio de A Ponte y el desarrollo de infraestructuras termales en las riberas del Miño y en el entorno de As Burgas. «Es fundamental que se avance en ello. Es lo que hará que la ciudad vuelva a funcionar», apostilló Alberto de Paula.
Politización
Labor crítica, pero bien entendida. Aunque no era el foro ni el motivo del debate, la política no pudo faltar en el encuentro sobre el PXOM de Ourense. La socialista Áurea Soto hizo una defensa de la politización del plan de urbanismo pero «bien entendida». En este sentido, aseguró que los representantes políticos son un reflejo de la sociedad y pidió al PP de Ourense que «siga el ejemplo del PP autonómico». Por su parte, el presidente de los constructores, Eligio Nieto dejó claro que sus intereses no casan con los de ningún partido: «Estamos totalmente fuera de la política. Lo que queremos es que el plan salga adelante».
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