Todavía no lo sé es su primera novela y destinará el beneficio de las ventas a la Fundación Josep Carrera contra la leucemia
25 nov 2014 . Actualizado a las 05:00 h.Noelia es una joven pontevedresa de 19 años que desde muy pequeña soñaba con estudiar Medicina, descubrir una vacuna contra el cáncer y ganar por ello el premio Nobel. No pudo hacerlo, pero ha encontrado el modo de contribuir en la medida de sus posibilidades a la erradicación de esa terrible enfermedad que se cobra tantas vidas. Lo hará por otro camino que acaba de iniciar con una prometedora carrera, la de escritora.
Su ópera prima, que presentó hace unos días en el Museo de Pontevedra, se titula Todavía no lo sé y los beneficios que saque de la venta de esta novela los donará a la Fundación Josep Carreras para la investigación contra la leucemia, uno de los cánceres más frecuentes en los niños, por los que reconoce que siente «debilidad».
Por una serie de circunstancias personales, Noelia no pudo estudiar Medicina, así que decidió hacer Ingeniería Industrial en la Universidad de Vigo, estudios que compagina - está en segundo curso- con su pasión por la literatura. A finales del pasado año se puso a escribir esta primera novela, un proyecto que tenía en mente desde los doce años. Creó un blog y fue subiendo a la Red algunos capítulos. «Todo el mundo me decía que estaba muy bien y que lo mandara a alguna editorial; me animé y me contestaron de la Editorial Seleer, de Málaga. Me dijeron que el comité de lectura le había dado el visto bueno y si quería la publicaban». Así fue y calcula que en menos de un mes estará ya en todas las librerías.
Todavía no lo sé narra la historia de tres personajes -uno de ellos tiene cáncer- con una relación en común y un pasado del que no pueden deshacerse. Pero a pesar del dolor, la rabia y el sufrimiento, encontrarán el valor necesario para seguir adelante.
Su pasión por la lectura se lo inculcó su tía. «Siempre me regalaba libros por mi cumpleaños y por Navidad». Y tuvo un profesor en Primaria, Celestino, «que nos animaba a todos sus alumnos a escribir una redacción cada semana, dándole continuidad como si fuera un libro».
Dice que intentó escribir ese primer libro varias veces, pero siempre se atascada, «hasta que se me ocurrió esta historia, con un principio y un final, y dije: esta es mi oportunidad».
Está convencida de que su novela «es buena» y su proyecto de contribuir a la investigación contra el cáncer, «interesante». «La historia engancha, quisiera que todo el mundo la leyese y, al mismo tiempo, hacer una buena obra».
Su intención es escribir una segunda parte, la continuación de Todavía no lo sé, porque la historia tiene recorrido.