El Río Breogán se refuerza con la llegada de Ben McLemore, una gran amenaza desde el tiro exterior. Con la salida de Justin Anderson, el equipo lucense pierde uno de sus referentes ofensivos, tanto a nivel de anotación como de liderazgo en la pista, y el nuevo exterior estadounidense es un perfil distinto, con otras cualidades, pero debe aportar puntos y asumir los balones importantes.
McLemore ha demostrado en varias temporadas en la NBA sus cualidades. Ha estado siempre en porcentajes cercanos al 40 % en triples y, en algunas ocasiones, disputando más de sesenta partidos en la mejor competición del mundo. Es capaz de anotar tiros tras balón doblado con defensores pegados, así como de generarse lanzamientos tras recibir el balón en un mano a mano. Si tiene que usar botes, lo hace principalmente para ganar espacio para lanzar a canasta.
Si bien es un muy buen jugador ofensivo, defensivamente creo que debe adaptarse aún al baloncesto europeo. Sufre en situaciones de contacto, aunque tiene capacidad física para llegar y taponar en el aro contrario.
Potencial tiene para aportar en los dos lados de la cancha, así que habrá que ver si su capacidad de adaptación y ambición le permiten convertirse en el nuevo referente que ansía el Pazo.