Conquistando el Príncipe Felipe y sacándose la espinita de hace un año en el mismo escenario. Un partido de rachas, en el que por fin apareció un Breogán activo en defensa, con ilusión y sin dar nada por perdido. Todos anotaron, todos se dejaron la piel, y con ello llegó esa primera victoria tan deseada.
Un primer cuarto con mucho ritmo y muy errático hizo que ningún equipo tomara ventaja. Muchas pérdidas por parte del Breogán que el equipo local zanjaba con transiciones rápidas y canastas fáciles, pero llegó la reacción y con buenas defensas consiguieron atascar a los de Jesús Ramírez complementado con un juego fluido que les ayudaba a mantenerse en el marcador.
En el segundo cuarto llega el primer tiempo muerto del partido por parte de Casimiro para intentar frenar el juego de Zaragoza, que empezó con muy buen acierto en el primer minuto. Buenísima reacción de los celestes con la vuelta de Russell a pista, asumiendo en ataque y haciendo jugar al equipo, con canastas fáciles de Shako y Brankovic y muy activos en defensa forzando ataques precipitados de Robinson.
Andric cargó la metralleta y Kurucs se sumó a la fiesta, para darles la mayor ventaja hasta el momento con una salida de vestuario de libro. Los maños no se dieron por vencidos y el talento nacional de Yusta apareció para darle un parcial de 7-0 a los locales. Otro cuarto igualado…
Al final. la falta de acierto desde el perímetro de los locales fue un lastre, que los gallegos supieron aprovechar para despegarse, con un listísimo Francis Alonso que sumaba en ambos lados.
Un partido sólido y emocionante, ideal para que los espectadores sigamos enganchados a este bonito proyecto breoganista.