Nicolás Pastoriza lleva más de treinta años en la escena musical. Sin embargo, fue el 2009, tras empezar a colaborar con Iván Ferreiro, cuando fraguó su actual proyecto. El músico vigués acaba de publicar «Luna de Kubrick»
25 sep 2015 . Actualizado a las 05:00 h.Nicolás Pastoriza publica Luna de Kubrick, su tercer disco en solitario, un trabajo artesanal muy estudiado y planificado, advierte el músico vigués, para el que contó con la colaboración gráfico de Víctor Coyote.
-¿Profundiza este disco en la línea marcada por su anterior trabajo?
-Tras el primer disco, El niño con la raqueta en el espejo, que lo hicimos juntos Iván Ferreiro y yo, Poetas y Motocicletas fue un disco de banda muy loco, que abrió un mundo de posibilidades. Sin embargo, hoy en día es muy complicado mover una banda en directo, y por eso, para este disco, me planteé hacerlo de forma que desde la base pudiera ser defendido por Martiño Toro y yo, que somos quienes estaremos en los directos.
-¿Cómo fue la grabación?
-Es un disco hecho en mi casa. Hice un pequeño estudio y apliqué lo que fui aprendiendo, aunque posteriormente se realizaron algunas modificaciones en estudios. Claro que yo vivo en un piso, lo que me obligó a jugar con samplers, pregrabados y emplear técnicas que casi se usan más en el hip hop que en el rock. Por eso denominamos, en broma, este disco como de samplerautor.
-Usted es un músico que siempre deja ver sus influencias. ¿Quiénes fueron en esta ocasión?
-Me impuse un régimen musical que tuviera esta esencia casera y artesanal. Salieron los dos primeros discos de Paul McCartney en solitario, Syd Barret cuando deja Pink Floyd, el disco Blanco de The Beatles, los primeros discos de Billy Bragg, Delmon Almon en solitario, Eels, mi gran referencia norteamericana, con Mark Everett el intocable, y Kevin Ayers, entre otros. Me hice una lista de reproducciones con todos ellos y los escuché bastante.
-Lleva treinta años en la música, pero ¿cómo le influyó el contacto con Iván Ferreiro?
-Desde el 2009 estoy colaborando con él. La forma de trabajar en su casa me inspiró para hacer cosas en la mía. He aprendido a jugar a la hora de grabar, haciendo efectos y empleando instrumentos de juguete. También me influyó en el trabajo con las letras. Nunca fui tan introspectivo escribiendo como él, que prácticamente escribe siempre en primera persona y de forma terapéutica. Yo tengo que hablar de otras personas, pero me abrió una vía. Me ayudó bastante. Ir a tomar café a su casa acaba en canción.
-¿Cómo llevará al directo este disco?
-Martiño Toro y yo llevaremos un kit de samplerautor. Martiño es uno de los músicos más versátiles que conozco; creo que no sería posible hacer esto sin él. En directo, respetamos las bases del propio disco y eso es posible gracias a él. Nos entendemos perfectamente tras cinco años tocando juntos.