Marc Egea, el último experimento del autor de «Nais»: «Me costaba leer novelas, por eso escribí este libro»
FUGAS

El dramaturgo y guionista se lanza a la narrativa con «Superpoder», una comedia «para-normal»
29 jun 2022 . Actualizado a las 09:57 h.Su trayectoria está vinculada al teatro y la escritura de guiones de ficción, pero Marc Egea (Barcelona, 1972) no teme a nada y por eso se ha lanzado a la narrativa con una obra que se mueve entre el humor negro y el suspense, que, como el prólogo advierte, no deja indiferente y que parte de los problemas de un matrimonio para mantener a flote una pequeña editorial. De entrada, porque no es posible encasillarla en ningún género existente. Superpoder (una comedia para-normal) ha sido concebida para ofrecer una lectura ligera, a la par que interesante, eliminando las descripciones tediosas y centrándose en la historia de unos personajes que resultan más complejos de lo que parece en las primeras páginas. Además, Egea está detrás de una de las obras de teatro que más darán que hablar este verano en nuestra comunidad: Nais, una comedia en la que dos madres muy diferentes se exponen a situaciones cotidianas.
—Dramaturgo y guionista, ¿qué lo animó a pasarse a la narrativa?
—Sí, efectivamente vengo del teatro y soy lector asiduo de novelas, como tanta gente. Noté que pasaba una cosa y es que me costaba mucho leerlas. Además, hay estudios que confirman que esto ocurre, por una cuestión de atención, por el mundo en el que vivimos. Todo a prisas, con tecnología, estamos todo el día con pantallas... Leyendo en foros me di cuenta de que hay personas que en muchas de las reseñas sobre los títulos se quejaban de las descripciones tan largas y, de hecho, confesaban saltarse pasajes por eso. Lo han incorporado ya como un hábito. Como usuario, comencé a buscar novelas, no breves, pero sí ágiles y me di cuenta de que no hay. Me refiero a algo cómodo de leer, que no te lleve semanas. Me di cuenta de que no había nada que respondiera a esa necesidad y se me ocurrió aplicar los conocimientos que tengo en dramaturgia, pero adaptándolo a una novela. El resultado es un libro que se lee rápido, en dos tardes.
—No es una obra fácil de catalogar, ¿cómo la define?
—No es una novela, pero tampoco es una obra de teatro, porque no tiene acotaciones en las que se explican las características técnicas del diseño de la escena. Por eso, no sé cómo llamarla. Propongo que, si alguien encuentra una palabra adecuada, me la haga llegar. De momento, la llamaré novela ágil. Ofrece una lectura diferente para gente que busca historias que se leen rápidamente.
—Empezó a escribir el libro después de iniciar la traducción una obra de Buck Richman, ¿cómo fue el proceso?
—Sí, en el prologo, escrito por Richman, se explica un poco este proceso. Richman buscaba a alguien para traducir al español un libro que estaba haciendo sobre Stephen King. Me contactaron a mí y abordé el trabajo. A partir de ahí, surgió la idea de escribir un libro. Originalmente era un texto grande, con más personajes.
—Finalmente se publicó su libro y no ese.
—Sí. Lamentablemente, quebró la editorial con la que trabajaba Richman y se detuvo la publicación de su obra. Yo, como trabajaba ya en la traducción, publiqué en la web artículos íntegros que decidí añadirlos como extra dentro de mi obra para que así no se perdiesen.
—Los personajes de su obra son complejos, ¿en qué se inspiró?
—Partí de la historia del libro sobre Stephen King y sus referentes. Bebí de ese texto y tomé ideas de personajes, dentro de ese universo tan grande, y los trasladé a una nueva historia con un nuevo enfoque, casi un nuevo género, con un tratamiento diferente. Vino de la intención de ahondar en King.
— ¿Tiene algún personaje favorito?
—Me resulta graciosa la pregunta porque cada vez que un lector me comenta cuál es el suyo y los motivos, me adhiero a él. Le tengo cariño a todos y todos tienen sus cosillas, pero con los que más tiempo pasas escribiendo es con los protagonistas, y por eso me quedo con Jack, aunque no tengo uno preferido ni uno por el que sienta antipatía.
—¿Cómo está siendo la acogida del libro?
—Pues estoy sorprendido porque, al venir del mundo del teatro, para mí esto es algo nuevo. Me abro directamente al público con esta obra y mi alegría es que algo que planteé como experimento, como un capricho mío, de: «Voy a probar», esté siendo bien acogido, por lo que ya me planteo buscar nuevas historias para darle continuidad a este formato.
—Justo le iba a preguntar por sus nuevos proyectos. ¿Escribirá otro libro entonces?
—Sí, me ha gustado la experiencia editorial, así que voy a seguir explorando. Tengo clavada la espinita de escribir una novela larga, pero más en el futuro, ya que no me voy a contradecir en este momento.
—Mientras, sigue trabajando en el teatro y escribiendo guiones para productoras.
—Sí, de hecho en Galicia estamos con un montaje teatral ahora. Se llama Nais, y está protagonizado por la humorista Eva Iglesias y la comunicadora Inma Morandeira, bajo la dirección de Javier Mariño. Empezó la gira a finales de abril y ya pasó por Noia y Rianxo, entre otras localidades. Circulará por todas las ciudades gallegas.
—¿Qué puede adelantar de «Nais»?
—Es una comedia escrita en un tono divertido y alegre. En la obra se van mostrando las distintas fases de la maternidad de la mano de dos madres que tienen personalidades muy diferentes y formas distintas de criar.