El técnico condiciona su continuidad a disponer de un equipo de garantías para las tres competiciones
07 abr 2016 . Actualizado a las 13:28 h.A mes y medio de que termine la temporada, todavía no es oficial quién será el encargado de dirigir los designios del Celta el próximo curso. Si bien todo indica que Eduardo Berizzo vivirá un tercer capítulo al frente del equipo, todavía no se ha concretado ni oficializado su continuidad en el club. La plantilla y la duración de su contrato son los dos puntos que marcan las negociaciones.
Si nada se tuerce en las próximas semanas, el Celta tendrá que afrontar tres competiciones el año que viene, Liga, Copa y Europa League -la Champions parece territorio imposible-, y Berizzo quiere hacerlo con garantías. Tras comprobar esta campaña cómo el disponer de una plantilla corta y a la que las lesiones le pasaron factura una y otra vez, dificultaba el ser competitivos, el entrenador quiere contar con jugadores suficientes para que el equipo no acuse el cansancio extremo que acarrean los tres torneos.
Este año el Celta comprobó en su propia piel la exigencia que supone jugar partidos entre semana una y otra vez. En el momento en el que los vigueses dejaron atrás el intenso torneo de Copa, fueron capaces de afrontar con más solvencia sus compromisos de Liga. Si a esas dos competiciones se suma una tercera con Europa como telón de fondo, la exigencia alcanza nuevas cotas. Berizzo quiere un equipo que rinda en las tres competiciones, y eso supone disponer de una plantilla más amplia y en la que todas las piezas cuenten.
Y ese es otro de los matices que el técnico quiere tener atado antes de poner su firma en el nuevo contrato. El Toto aspira a tener una plantilla de calidad, sabiendo las limitaciones que pueda tener el club. El preparador pide refuerzos que incrementen la calidad de una plantilla que ha ido mejorando paso a paso en los últimos mercados, y que hoy por hoy es capaz de competir a gran nivel. Berizzo está satisfecho con los jugadores que tiene este año, pero para poder competir en varios torneos al mismo tiempo y codearse con los mejores, entiende que deben apuntalar el equipo.
Además, está por ver qué sucederá en el mercado de verano. El futuro de Nolito, de nuevo, es el más incierto, y el gaditano es uno de los buques insignia de la plantilla. De ahí que si cuaja su salida habría que buscarle un reemplazo de nivel. Y lo mismo sucede con otros jugadores, como es el caso de Gustavo Cabral.
Fue el propio Carlos Mouriño, en una comparecencia, el que dejó entrever que a la hora de renovar Berizzo estaba interesado en un contrato de corta duración, mientras que el Celta prefería una vinculación más extensa. Todo apunta a que finalmente la tesis del entrenador la que se imponga, lo mismo que los plazos a la hora de negociar. Aunque el Celta se mostró partidario de hablar de su continuidad hace meses, el técnico prefirió comprobar hacia dónde iba la temporada antes de sentarse a negociar su ampliación de contrato.
En el apartado económico, la renovación conllevará una revisión al alza del salario del cuerpo técnico, de los más bajos de la Liga, si bien el incremento seguirá dejando al Toto y a su equipo lejos del top económico de los preparadores.
A pesar del buen trabajo que está realizando en el Celta no ha pasado desapercibido a nadie, y más de un club intentará atraer al técnico con propuestas más elevadas, el Toto prioriza continuar en Vigo y disfrutar del equipo en Europa al apartado económico. Eso sí, no quiere ir a la guerra con lanzas, y ya se lo ha hecho saber al Celta.