Berizzo aplaude la solidez defensiva y reclama mayor circulación en ataque
25 sep 2016 . Actualizado a las 05:00 h.El Celta ha adquirido la solidez defensiva, el primer paso para crecer en la Liga, y ahora necesita recuperar la velocidad en la circulación de balón. Esa es la hoja de ruta que ha diseñado Eduardo Berizzo para que los vigueses vuelvan a ser el equipo fiable de la temporada pasada.
En su análisis, el entrenador del Celta ve a su equipo en línea ascendente: «Todavía tenemos un margen de mejora importante, pero siento que vamos hacia arriba, siento que agregamos cosas a nuestro juego, hemos conseguido la solidez defensiva necesaria para atacar con tranquilidad en estos dos partidos. Tanto en Pamplona como en casa ante el Sporting hemos defendido muy bien y eso nos otorga una tranquilidad en el ataque que se relaciona».
Dado el primer paso, la plantilla celeste debe atacar ahora el segundo objetivo para ganar en poder ofensivo (por ahora lleva tres goles en cinco partidos). «Creo que debemos seguir insistiendo con nuestra circulación, con la velocidad de pase, con la intensidad de circulación de balón para otorgar a nuestros atacantes más ventaja en la construcción de su jugada».
Uno de los aspectos pendientes es que «nuestras bandas conecten con nuestros centro atacantes de una manera fluida y peligrosa». Para ello, parece decidido a insistir con Bongonda y Pione Sisto, dos jugadores muy verticales que pueden acelerar el juego y explotar espacios a la contra.
El Toto habló ayer de la aportación del danés en función del costado que ocupe: «La intención de ponerle a pierna cambiada era para que otorgase la posibilidad a nuestros laterales de pasar por fuera y que encuentren a nuestros centro atacantes que a veces no viven de la circulación. Esa era la idea. La idea tiene que ver con su marcador, con el tipo de defensa que sea, con la sociedad que constituya con su lateral por esto de pasar por afuera o por dentro». De cara al partido de esta noche, existe la posibilidad que inicie en la izquierda para aprovechar su velocidad.
Porque Berizzo considera al Espanyol un equipo peligroso en un partido de ida y vuelta, algo que intentará evitar adueñándose del balón. «Somos un equipo que desea el balón y que construye su juego a partir de la circulación, del pase. Necesitamos que el balón sea nuestro y para eso hay que presionar muy bien, hay que contener a su dupla de atacantes, desplegar al equipo sobre todo en el ancho para poder circular la pelota con espacios y si el partido se vuelve un ida y vuelta el Espanyol se siente más cómodo jugando con espacios a la contra con sus dos atacantes que juegan muy juntos y nosotros no somos un equipo que propone jugar así, pero también sabemos hacerlo». Advirtió también del talante ofensivo de sus dos hombres de banda y del equilibrio que tienen en el centro del campo.
El desafío de derribar la última muralla
El Celta fue capaz de derribar la temporada pasada el muro del Coliseo de Getafe. Por primera vez en su historia ganó en el feudo azulón. Fue en una segunda vuelta en donde también estuvo cerca de soltar amarras en Cornellá, pero al final tuvo que conformarse con un empate a un gol porque Asensio neutralizó el tanto inicial de Iago Aspas.
Hasta ese empate, todas las visitas del cuadro celeste a la nueva casa del Espanyol habían finalizado con derrota y generalmente con malas actuaciones. Ahora, Berizzo más que una salida difícil, ver un reto en el desafío de buscar la primera victoria: «Es una motivación más. Siempre que nos enfrentamos a un partido en donde no hemos sido capaces de ganar en el pasado es una motivación para hacerlo en el presente».
Más allá del gafe de Cornellá-El Prat, la salida a Barcelona para jugar con el Espanyol casi nunca le ha sentado bien al Celta. Históricamente solo consiguió cinco triunfos en sus 47 visitas ligueras, en todas ellas dejando su portería a cero (0-2, 0-1, 0-1, 0-1 y, más recientemente, 0-4 en 2003/04). Desde entonces todas las visitas han sido negativas. Hoy parece una buena oportunidad para cambiar el rumbo de la estadística.