
Los de Berizzo apenas tendrán tiempo para recuperarse de su viaje a Krasnodar para jugar el derbi frente al Deportivo
14 mar 2017 . Actualizado a las 05:00 h.La agenda del Celta es leonina. Sin tiempo para recuperarse del varapalo frente al Villarreal, visita este jueves al Krasnodar en la vuelta de la Europa League y el domingo acude a Riazor para jugarse tres puntos en el derbi frente al Deportivo, uno de los encuentros señalados en el calendario.
Los hombres de Berizzo apenas tendrán tiempo para recuperarse de su viaje a Krasnodar, pero intentarán hacer buena la estadística de esta temporada. Tras la disputa de nueve partidos de la Europa League, cuatro de ellos como visitantes, solo en dos ocasiones han perdido el duelo siguiente de Liga. Contra el Villarreal el domingo, y tras medirse al Sevilla.
En el arranque de la temporada, tras empatar con el Standard de Lieja, el Celta empató 0-0 con el Osasuna, y tras medirse al Panathinaikós llegó el triunfo 4-3 sobre el Barcelona. La visita del Deportivo, que concluyó 4-1, cuadró tres días después de que los vigueses se enfrentasen al Ajax en un partido que acabó en tablas 2-2, mientras que después de la visita de los holandeses a Vigo los de Berizzo fueron capaces de vencer 2-1 al Valencia. El tiempo que habían tenido para recuperarse había sido de tan solo tres días.
Después de empatar con el Standard a finales de noviembre, al Celta le tocó verse las caras con el Granada y el resultado fue positivo, un 3-1 con goles de Aspas, Bongonda y Diop en propia puerta.
Fue a la vuelta de Grecia, tras conseguir la clasificación para los dieciseisavos de final de la Europa League, cuando los célticos sufrieron su primer revés tras nueve contiendas. Fue al caer 0-3 en la visita al Sánchez Pizjuán para enfrentarse al Sevilla.
El Celta, sin embargo, salió bien parado en el duelo contra el Osasuna tras haber perdido 0-1 frente al Shakhtar en la ida celebrada en Balaídos. En la vuelta los goles de Aspas y Cabral en la prórroga permitieron al equipo alcanzar los octavos de final, y a pesar del cansancio y del viaje, el grupo que dirige Berizzo fue capaz de atar un empate en el Molinón en un duelo con polémica. Queda por ver qué sucederá en el derbi dominical.