El baile de los centrales del Celta

La Voz X. R. C. VIGO / LA VOZ

GRADA DE RÍO

La dupla de zagueros es el puesto que más ha cambiado en el arranque de la Liga

17 sep 2017 . Actualizado a las 00:04 h.

Después de tres partidos Unzué ya ha utilizado a sus cuatro centrales, ha hecho cuatro combinaciones (de seis posibles) y ninguno de ellos ha repetido titularidad. Un baile que no es exclusivo solo del Celta en estos inicios de Liga. Berizzo ya hizo debutar a su cuarteto y Marcelino García medita una nueva versión en el Valencia pese a no haber repetido todavía. ¿Cabral y Fontás arrancarán como titulares el lunes en Cornellá? Esa es una de las grandes dudas para visitar al Espanyol.

 

Después de la portería, el de central es uno de los oficios que más confianza necesitan en el mundo del fútbol. Sin embargo, la tendencia está cambiando en las dos ubicaciones más importantes a nivel defensivo. Unzué por el momento mantiene la confianza en Sergio bajo los palos, pero es el centro de su defensa el foco de mayores cambios en sus formaciones en el poco tiempo que lleva el Vigo. Como estaba cantado tras el verano, Cabral y Fontás fueron su primera pareja de centrales ante la Real Sociedad, pero la remontada txuri urdin abrió el paso para que Sergi Gómez y Roncaglia jugasen en el Benito Villamarín. Incluso una molestia del argentino alteró el orden en esa contienda al entrar en el campo Cabral (que es el único que participó en los tres partidos). Frente al Alavés volvió el dúo del inicio liguero pero en la recta final de la contienda Unzué añadió un nuevo golpe de rumbo sacando a Fontás y metiendo en el campo a Sergi. «Creíamos, por el tipo de juego que estaba haciendo el Alavés, ese cambio nos iba a ayudar», dijo Unzué. A la vista del resultado final acertó, ya que por primera vez el equipo fue capaz de mantener su portería a cero.

El aval de la victoria y de no encajar por primera podría ser el detonante para que la dupla de centrales que iniciaron ante el Alavés pudiesen repetir por primera vez. Cabral, por los números, es el que goza de más confianza. El argentino jugó completos los dos partidos de casa y disputó el último cuarto de hora del Villamarín. Aporta contundencia a la hora de defender y ante el Alavés fue una pieza importante para contrarrestar el juego aéreo del rival.

Los otros tres

Fontás parece el gran beneficiado de la apuesta combinativa. Sacar el balón desde el portero requiere un hombre de la calidad del catalán para ganar metros. Sin embargo, ya se ha perdido un partido y fue el sacrificado en otro en un cambio contracorriente, por eso su asentamiento en el once ofrece más dudas.

Sergi Gómez y Facundo Roncaglia, aunque han jugado menos, no parecen estar un peldaño por debajo. Unzué, comentó en alguna oportunidad que en sus decisiones tendrá que ver el rival (por su tipo de juego y de futbolistas).

Curiosamente y pese a esta falta de asentamiento de un dúo de centrales en el once, y a haber encajado cinco goles en los dos primeros partidos, el Celta es el cuarto equipo que menos tiros concede con una media de 9,3 por partido.