Pros y contras del Tucu: entre el aval de la calidad y el juego aéreo y su adaptación
GRADA DE RÍO
Unzué justificó en una ocasión la falta de protagonismo de Hernández por su dificultad para acoplarse al juego
08 feb 2018 . Actualizado a las 10:31 h.Unzué habló en una ocasión de «falta de adaptación al juego» para explicar la ausencia del chileno en las formaciones. Una frase cuando menos llamativa para un jugador muy importante en las dos últimas temporadas, que aporta envergadura para el juego aéreo y que además está dotado técnicamente. No obstante, el navarro también reconoció que «ha estado muy bien cuando ha jugado y siempre nos da cosas interesantes».
SU JUEGO
Calidad y un punto de pausa
El Tucu Hernández es uno de los jugadores mejor dotados técnicamente en el plantel céltico, un futbolista que llegó como media punta y que fue reconvirtiéndose hacia el doble pivote. Su lectura de juego le da además un punto de pausa al ataque.
ENVERGADURA
Clave en el juego aéreo
Hasta la llegada de Maxi Gómez, el chileno era el sostén del juego aéreo en el equipo vigués, tanto a nivel defensivo como ofensivo. Con su presencia en el campo, la medular gana poderío físico.
ELECCIÓN
Mal parado en los duelos con rivales que juegan el balón
Cuando el Celta tiene enfrente a un rival de similares características, Unzué suele apostar por jugadores de buen pie, como el caso de Jozabed, más ADN Barça. En ese contexto puede explicarse su exclusión para los duelos con Real Sociedad y Betis, pero la contienda con el Alavés, de más músculo, parecía pintiparada para el chileno, y sin embargo no tuvo un solo minuto.
POSICIÓN
Radoja y Jozabed como rivales directos
Con Lobotka al margen, Hernández tiene que luchar por un puesto con Radoja, que ha adelantado su posición, y con Jozabed, que se adapta al doble pivote pese a su rol de media punta.