El lateral asume que la afición es libre de opinar pero recuerda que «no somos perfectos»
18 mar 2018 . Actualizado a las 23:41 h.El Celta no fue capaz de pasar de un empate sin goles frente al colista y la sensación que trasladó durante muchos minutos fue de no estar dando todo de sí. Esa fue, al menos, la interpretación de una parte de la afición, que acabó el partido con algunos silbidos a sus jugadores y al cuerpo técnico. Una situación a la que el capitán, Hugo Mallo, respondió en caliente nada más acabar el choque.
«La afición es libre de opinar, si bien es cierto que si vienen aquí nos gusta que sea para animar, no dejamos de ser un grupo de chavales, muchos de casa, y cuando se escucha algún silbido, a mí me toca los huevos, te lo digo en serio», declaró a los micrófonos de beIN. «Nosotros somos los primeros que queremos ganar, hay veces en las que no salen las cosas. No somos perfectos. Si fuésemos perfectos estaríamos en el Barça o en el Bayern. Somos el Celta, hay que tener tranquilidad», dijo.
Mallo insistió en que hay que tener claro el pasado reciente del club. «Sabemos de dónde venimos, pero hay gente que no lo sabe, que no valora el trabajo y es una pena. Pero son cuatro gatos los que están silbando, al resto, darle las gracias por estar un día más animándonos y por ellos intentaremos luchar hasta el final. Sinceramente, este equipo lo que tiene es que en los momentos malos siempre va para adelante. Hemos tenido una oportunidad que hemos perdido y hasta el final tenemos que luchar».
Desde el arranque de la temporada los propios futbolistas del Celta pusieron sobre la mesa que el objetivo era pelear por regresar a competición europea y, visto el ritmo de sus competidores, el reto parecía factible. Sin embargo, los resbalones propios han ido distanciando la meta. «Teníamos que haber sacado los tres puntos, pero el Málaga también compite, tiene buenos jugadores, lo hemos intentado con más suerte o menos suerte y no ha podido ser», razonó Mallo.
El análisis del lateral de Marín del partido fue que «la primera no estuvimos bien, nos apretaron bien, nos costó sacar el balón con fluidez y rapidez pero teníamos que seguir. En la segunda intentamos un juego más directo y el Málaga se replegó bien con dos líneas de cuatro. Tuvimos alguna ocasión, como la de Iago, pero no fuimos capaces. No hay más. No hay que decir nada más, hay que seguir. Viene el parón, tenemos que prepararnos, mentalizarnos, trabajar en todos los aspectos e ir por el Athletic».