El técnico del Celta elogia sus cualidades, pero le emplaza a mejorar el idioma y «provocar situaciones para que los compañeros le quieran»
26 jul 2018 . Actualizado a las 23:13 h.Emre Mor comentaba la semana pasada en una entrevista a La Voz que siente la confianza de su nuevo técnico, Antonio Mohamed. Este, sin embargo, le pide algo a cambio. El argentino cree que el hecho de que se reconduzca o no la situación del turcodanés -que con Unzué acabó el curso pasado apartado por indisciplina- va a depender de que el jugador ponga o no de su parte para que sea así. Y le emplaza a hacerlo.
«Yo no puedo meterme en la cabeza de nadie. Puedo sugerir, aconsejar e incluso acompañar en ciertos momentos, pero entrar en la cabeza de alguien es muy difícil», señala el entrenador del Celta preguntado al respecto. Ensalza sus virtudes, pero recuerda que hacen falta más cosas. «Es un chico que tiene muchas cualidades futbolísticas pero debe provocar situaciones para que los compañeros le quieran y a partir de ahí puede funcionar mucho mejor», indica. Considera, además, que el primer paso sería «hablar mucho mejor español para que tenga mejor comunicación con todos».
El técnico prueba en la media punta al turcodanés, que tuvo un encontronazo con Mazan
El entrenamiento a puerta abierta de ayer en A Madroa sirvió a Antonio Mohamed para seguir haciendo probaturas. El técnico del Celta organizó un pequeño partidillo y en el teórico equipo titular estaban Hugo Mallo, Costas, Roncaglia y Juncá en la defensa; Lobotka y Okay en el centro; Emre Mor en la mediapunta como gran novedad, con Brais a la derecha y Hjulsager en la izquierda, y Beauvue en punta.
Enfrente tenían una zaga formada por Kevin, Cabral, Araujo y Mazan; Molina y Juan Ros; Eckert, Juan Hernández y Jozabed, y Apeh. Mazan y Mor tuvieron un encontronazo cuando tras una entrada del primero, el segundo respondió con un empujón. No pasó a mayores y cuando Hugo Mallo se dirigía a intermedia, el propio Mor ya se alejaba del internacional con Eslovaquia.
