La nueva era nace con urgencias

X.R.C. VIGO / LA VOZ

GRADA DE RÍO

Oscar Vázquez

El luso Miguel Cardoso se estrena en el Celta con la zona de descenso a tres puntos

26 nov 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

La era Miguel Cardoso se inicia para el Celta con la zona de descenso en los talones y ante un rival que se ha marcado el objetivo de ganar su primer partido en casa en el sexto intento. Números que añadir a un encuentro convertido en examen: para un técnico que inicia su tercer proyecto en solitario (en dos temporadas) y para varios jugadores que pasan del ostracismo a verse en el escaparate de la titularidad. Salvo que jugase al despiste, el portugués cambiará al menos a medio equipo con respecto a la despedida de Mohamed de Vigo.

Aunque no hay motivo para la alarma, Cardoso debuta en un momento delicado porque los resultados de la jornada le dejan a tres puntos de una zona de descenso que marca el Athletic de Bilbao, mientras que el sueño continental ya se ha marchado a seis.

La Real, dos puntos por encima de los vigueses, no tiene esa urgencia en el retrovisor pero sí una tarea pendiente desde el inicio de temporada, ganar en casa. Porque los txuri urdin son el mejor visitante del campeonato con 13 puntos pero en casa solo han conseguido empatar tres de los cinco encuentros disputados (ante Rayo, Girona y Sevilla) y su bagaje goleador se reduce a tres dianas. Y el Celta, en los últimos tiempos, se ha vestido en más de una ocasión de buen samaritano. Además, fuera de casa los celestes solo han ganado un partido hasta la fecha (en agosto al Levante). Desde entonces dos empates y otras tantas derrotas.

La revolución parece un buen antídoto frente a esta necesidad. El Celta estrena preparador a mitad de temporada por primera vez los últimos seis años, un síntoma inequívoco de lo oscuro que pintaba le panorama en la cúpula de A Sede. Y el cambio parece llegar repleto de novedades en el once. «En este equipo nadie tiene la titularidad asegurada», anunció en voz alta Miguel Cardoso. Tanto, que hasta la portería y el nueve para Anoeta son motivo de misterio. De hecho, el propio entrenador no confirmó que Maxi Gómez, pese a sus seis goles en lo que va de Liga, vaya a ser titular al lado de Iago Aspas, sino que el 4-2-3-1 invita a pensar en el charrúa esperando turno en el banquillo.

Aunque las grandes novedades, si se confirman las probaturas, será el debut de Kevin en liga como lateral derecho por la baja por sanción de Hugo Mallo y la presencia de Jozabed, tras seis meses en blanco, en la sala de máquinas aprovechando las lesiones de Lobotka y Beltrán. David Costas, que solo jugó ante el Valladolid, también es la opción número uno para suplir en el centro de la zaga a Cabral, otra de las víctimas del comité de competición. Araujo, Pione Sisto y Emre Mor también son candidatos a ponerle rostro a la revolución del nuevo entrenador.

Aunque la transformación radical debe llegar en la puesta en escena. Mohamed nunca tuvo un patrón y Cardoso tiene claro que lo primero es encontrar una línea de juego fundamentada en unos pilares básicos: posesión de balón, un equipo con presencia continuada en campo contrario y un entramado táctico lo suficientemente fuerte para cortar la sangría de goles.