Cuestión de pegada del Celta en el Metropolitano

X.R. CASTRO VIGO

GRADA DE RÍO

El conjunto celeste tuvo ocasiones y compitió en el Metropolitano, pero sin Aspas le faltó la pegada que tuvo el Atlético con Griezmann y Morata

13 abr 2019 . Actualizado a las 21:12 h.

La pegada desniveló la balanza. El Celta compitió y tuvo sus oportunidades en el Wanda Metropolitano pero le faltó el colmillo y la magia que le impregna Iago Aspas al equipo y terminó sucumbieron a la pegada del Atlético de Madrid, que resolvió el partido con una falta directa lanzada por Griezmann al palo del portero y en una contra que culminó Morata tras asistencia del francés. Ahí se notó la diferencia. Fue más letal para el Celta la simple baja de Iago que las siete que acumulaba el conjunto colchonero. La derrota, no por esperada, frena la recuperación del conjunto vigués y le obliga a mirar de reojo la jornada del domingo para saber cómo queda su situación en la lucha por la supervivencia en Primera.

El Celta tuvo tantas ocasiones como llegadas en el primer tiempo. Sus tres tiros cogieron portería y a todos ellos, a cada cual más envenenado, llegó Oblak, que estuvo soberbio en una doble oportunidad de Maxi Gómez y Boudebouz y en otra de Boufal. El esloveno impidió que el cuadro vigués desde la contra se adelantase en el partido y el Atlético encontró premio a su dominio en un lance a balón parado cuando el descanso ya comenzaba a asomar en la tarde del Metropolitano. Una falta de Cabral desde la frontal permitió a Griezmann sacar un obús y superar a Rubén que ni vio el balón pese a que iba dirigido a su palo.

El tanto fue un mazazo para los célticos, que con Emre Mor en banda derecha y Boudebouz como enganche, habían aguantado de un modo solidario en el primer tiempo con el flanco derecho del ataque colchonero como principal foco de preocupación.

Con el marcador en contra, Escribá decidió que su equipo diera un paso adelante a la vuelta del vestuario. Se instaló en campo contrario y comenzó a buscar las bandas, especialmente el flanco izquierdo con un Sofiane Boufal exquisito para el espectador neutral y desesperante para el aficionado celeste. Boufal lleva el balón cosido al pie, tiene un cambio de ritmo espectacular y es uno de los supervivientes de una especie en extinción como los futbolistas de uno contra uno, pero su toma de decisiones es pésima. Por eso se inventa regates imposibles que acaban con pérdida de balón y contragolpe del rival.

De hecho, en la fase de dominio más clara del Celta, el único disparo real de los vigueses fue uno de Maxi Gómez desde la frontal que no cogió portería. Durante ese tiempo el Atlético se dedicó a esperar tranquilo en la frontal del área y esperar un contragolpe que evitase cualquier riesgo final. Lo consiguió Griezmann tras una pérdida de balón de Boudebouz muy cerca de la media luna colchonera. El francés proyectó un pase largo y Morata, recién entrado en el campo, hizo todo lo demás. Carrera, regate a Rubén Blanco y tiro cruzado para sentenciar el partido cuando faltaba un cuarto de hora.

El Celta mantuvo el tipo, tuvo un par ocasiones con Pione Sisto como activador, pero fue de nuevo Griezmann quien estuvo más cerca del tercero. De nuevo en una contra que terminó con el balón por encima de Rubén camino de la portería, pero Olaza, el único que bajó a ayudar, fue capaz de impedir el gol.

La derrota supone la novena salida consecutiva del Celta sin ganar (dos puntos de 27 posibles a domicilio) y le deja pendiente de los resultados de Villarreal y Valladolid para saber si tiene que hacer otra visita a la zona de descenso, aunque pase lo que pase este domingo, los célticos se jugarán la vida el sábado con el Girona. Otra final con mayúsculas.

Ficha técnica:

2 - Atlético de Madrid: Oblak; Juanfran, Toni Moya, Montero, Filipe (Arias, m. 72); Koke, Rodrigo, Saúl, Vitolo (Morata, m. 62); Griezmann (Mollejo, m. 91) y Correa.

0 - Celta: Rubén Blanco; Hugo Mallo, Cabral, Araujo, Lucas Olaza; Emre Mor (Sisto, m. 66), Okay Yokuslu (Fran Beltrán, m. 84), Lobotka; Boufal (Jensen, m. 85), Maxi Gómez y Boudebouz.

Goles: 1-0, m. 42: Griezmann, de falta directa con la zurda. 2-0, m. 75: Morata regatea a Rubén Blanco y marca, tras una asistencia de Griezmann.

Árbitro: De Burgos Bengoetxea (C. Vasco). Amonestó a los locales Juanfran (m. 56) y Griezmann (m. 68) y a los visitantes Boudebouz (m. 37) y Lucas Olaza (m. 88).

Incidencias: partido correspondiente a la trigésimo segunda jornada de LaLiga Santander, disputado en el estadio Wanda Metropolitano ante 55.269 espectadores.