La Federación de Peñas reconoce a estos dos colectivos en la convención que se celebra este mediodía
04 may 2019 . Actualizado a las 11:51 h.Peñas celtistas ha habido muchas, algunas que han durado un suspiro y otras que han perdurado en el tiempo. Pero dentro de estas últimas la excelencia de alcanzar los 50 años de vida está al alcance de muy pocas. En este año 2019 lo han conseguido las agrupaciones celtistas de Noia y Vilalba, que serán homenajeadas en la convención anual de peñas que se celebra este mediodía.
Se de la circunstancia de que las que acaban de alcanzar el medio siglo son peñas que están separadas de Vigo por un buen puñado de kilómetros. En el caso de la de Vilalba, José Luis Lozano explicaba en su día a Grada de Río que en los inicios presenciar los partidos de Balaídos tenía un peaje en forma de «viajes terroríficos de seis horas en autobús». La fidelidad mantenida al margen de categorías y cualquier tipo de circunstancias tiene una explicación clara según Lozano: «Una tradición celtista que llevamos dentro, que pasa de padres a hijos como las cofradías de Semana Santa».
En el mismo año 1969 en que echaba a andar la Peña de Vilalba lo hacía también la de Noia. «O celtismo desta vila ten un porqué e son as relacións comerciais con Vigo», explicó Ramón Vidal a Grada de Río. «Aquí o comercio facíase todo con Vilagarcía e con Vigo, coa parte sur, entón a base de arrimarnos foise collendo tamén o celtismo. Vén todo de aí. Agora xa é unha cuestión de tradición, algo histórico de aquí, que para moitos foi así case desde que temos recordos», argumentaba.
Pero más allá de los porqués de los inicios de cada una de las peñas, lo que las diferencia es la fidelidad y la capacidad para transmitir la pasión celtista de generación en generación.
