Karpin despunta como técnico del Rostov

Efe VIGO

GRADA DE RÍO

ROSTOV

El equipo del excéltico marcha segundo en la liga rusa por detrás del Lokomotiv Moscú

07 oct 2019 . Actualizado a las 19:10 h.

El excéltico Valeri Karpin ha relanzado su carrera como entrenador en el Rostov, equipo que es ahora segundo clasificado en la liga rusa con los mismos puntos que el líder, el Lokomotiv Moscú. La victoria del Rostov el domingo en casa del líder, el CSKA Moscú (1-3), dejó claro que el equipo cosaco es un serio candidato al título, pese a no contar con grandes nombres en su plantel.

Con Karpin en el banquillo, el Rostov solo había podido ser noveno y undécimo las dos últimas temporadas, pero en esta ocasión está demostrando una gran solidez desde el inicio del campeonato. Karpin recuperó a jugadores desahuciados como el finlandés de origen ruso Román Yeriomenko, sancionado por dopaje, y al búlgaro Ivelin Popov, descartado por el Spartak, y su rendimiento ha sido altísimo. Lo mismo se puede decir de Iónov, que ahora es un fijo en la selección rusa, aunque la gran revelación es el uzbeko Eldor Shomurodov.

Lleva ya diez goles en doce partidos de liga, el último este domingo ante el CSKA, algunos de remate y otros producto de jugadas individuales, ya que, pese a su 1,90 metros de estatura, no es un futbolista exento de técnica. Más arriesgada fue su decisión de rescatar a Pável Mamáev, recién salido de la cárcel tras cumplir casi un año en prisión por gamberrismo y agresión, y que había sido rechazado por su antiguo club, el Krasnodar.

Aunque rechaza cualquier clase de favoritismo -llama «locos» a los que creen que puede ganar la liga-, Karpin ha sonado en las últimas semanas como técnico del Spartak Moscú, el gran fiasco de la temporada, pero él asegura que se siente bien en Rostov. Karpin ya fue segundo en la liga rusa en dos ocasiones al frente del Spartak (2009 y 2011-12), pero desde entonces no logró asentarse ni en Rusia (Torpedo) ni en España (Mallorca).

Dejó el fútbol para trabajar como redactor jefe en un canal de deportes de nueva creación, Match TV, pero lo dejó porque echaba de menos el trabajo con los futbolistas. En su momento aseguró que el mejor jugador al que había entrenado es el madridista Marco Asensio, al que ayudó a explotar con 18 años en el Mallorca.

A sus 50 años, Karpin no renuncia a regresar a España, pero antes quiere aprovechar esta segunda oportunidad que le ha dado el fútbol con el Rostov, club cuyo mejor puesto en la liga rusa fue el segundo lugar en (2015-16) con Kurbán Berdíev en el banquillo.

En España Karpin no logró títulos como jugador -aunque fue finalista de la Copa con el Celta y segundo en liga con la Real-, pero sí en Rusia, donde en las filas del Spartak fue campeón de la última copa soviética y de las tres primeras ligas rusas tras la caída de la Unión Soviética (1992, 93 y 94).