Los vigueses cosecharon dos victorias, tres derrotas y un empate ante el antecesor de su rival de Copa
10 ene 2020 . Actualizado a las 09:12 h.El Celta y el antecesor del A.D. Mérida se vieron las caras en contadas ocasiones, pero protagonizaron algunos encuentros muy recordados por unos y otros, especialmente en la última vez que se cruzaron, en la temporada 1997/1998 en Primera. Antes habían coincidido en Segunda en la temporada 1991/1992 y en la máxima categoría en la 19995/1996. Un total de seis encuentros que se saldaron con tres victorias celestes, dos de los emeritenses y un empate.
En Segunda a principios de los 90 llegó esa única igualada (2-2) en Balaídos. Fue el 5 de enero de 1992 y los goles celestes los anotaron Gil y Damián. Curiosamente, en el equipo que se enfrentó a los de Txetxu Rojo había dos futbolistas que también vistieron la camiseta celeste: Santiago Cañizares lo haría desde la temporada siguiente, mientras que Julio Prieto había defendido el escudo del equipo vigués con anterioridad (1987-1990).
En la vuelta de esa misma temporada, en la penúltima jornada del campeonato el 17 de mayo de 1992, el triunfo fue para el Mérida por 2-1 y con gol celeste de Mosquera. A pesar de ese tropiezo, el Celta terminó la liga en la primera plaza y consiguió el ascenso con 53 puntos; tampoco le fue mal al Mérida, que acabó séptimo en una campaña en al que tuvo tres entrenadores (Caturla, Juanito y José Enrique Díaz).
Ya en 1995, el Mérida sería el campeón en Segunda, coincidiendo por primera vez en Primera con el Celta en el curso 1995/1996. En esa ocasión, con otro excéltico como Juanma Prieto en las filas rivales, el Celta de Castro Santos se impuso en Balaídos (2-0, Ratkovic y Bajcetic) al equipo que dirigía Kresic. En la vuelta el resultado fue el mismo, favorable a los locales y precisamente con dos goles de Prieto.
Por último, en la campaña 1997/1998 se disputaron los duelos más emblemáticos en un sentido y en el otro. En la ida, el Mérida sorprendió al Celta con un resultado histórico de 4-0 en el Estadio Romano, su mayor goleada, y también con un excéltico en el equipo, Mariano Hoyas. Pero los de Irureta se tomaron la revancha en la vuelta, en la última jornada en Balaídos, ganando 2-0 (Moisés y Gudelj) con las consecuencias del descenso del Mérida (que ya no regresaría a Primera) y con su histórica segunda clasificación para Europa.
Así, el Celta tiene pendiente firmar una victoria en el Estadio Romano tras haber sido derrotado en sus tres visitas anteriores. Los dos triunfos y el empate se dieron en Balaídos.