Las sensaciones y las cifras dicen que el colombiano respondió en su debut a la confianza de Óscar García Junyent
22 ene 2020 . Actualizado a las 13:59 h.El recién llegado central colombiano Jeison Murillo fue la gran sorpresa del partido frente al Athletic Club. Pese a que llevaba solo dos entrenamientos, y a que Araujo y Aidoo parecían formar una pareja de centrales más que consolidada, Óscar García Junyent no dudó en darle la titularidad al primer fichaje del Celta en este mercado. Lo colocó al lado del mexicano y sentó al ghanés.
Murillo, que llegó al Celta desde una Sampdoria donde el cambio de entrenador le había supuesto perder protagonismo, respondió a la confianza del catalán. Lo dicen las sensaciones, pero también los números. En su primer encuentro con la camiseta celeste, ganó todos sus duelos (diez), además de realizar diez despejes y lograr siete recuperaciones. A los registros anteriores se suma un 84 % de pases precisos (21 de los 25 que intentó), además de un 100 % de acierto en las entradas realizadas (cuatro de cuatro). Ganó cuatro balones aéreos y se mostró cada vez más compenetrado con Araujo con el paso de los minutos a lo largo del partido.
El defensor hizo gala, además, de las virtudes que sobre el papel avalaban su fichaje por el Celta. Se le vio bien situado, rápido, con capacidad tanto para sacar el balón desde atrás como por arriba. También dejó clara la faceta del liderazgo que tanto ha destacado el entrenador que necesita este equipo, animando a los compañeros y mostrándose metido en el partido. No acusó tampoco la falta de inactividad, pues su último partido completo había sido frente a la Juventus el 18 de diciembre. Luego había jugado cuatro minutos contra el Brescia el 12 de enero.
Ya nada más terminar el duelo, García Junyent había tenido palabras de elogio para él, aparte de reconocer que la llegada de este futbolista al equipo era «una prioridad» para él. Destacó Óscar lo rápido que se había adaptado al equipo, recordando que apenas le tuvo a sus órdenes en dos sesiones antes de darle la titularidad. También recordó su experiencia anterior.
Esa experiencia le diferencia precisamente del gran perjudicado de la decisión de Óscar fue Aidoo, que hasta el pasado fin de semana era el segundo jugador con más minutos tras Aspas -le superaron en San Mamés Olaza y Rubén-. Por primera vez desde su debut le tocó ver un partido de Liga desde el banquillo. En su día también había dejado buenas sensaciones en su estreno.