«El Toro mereció más oportunidades, probablemente saldrá cedido»

L. Méndez VIGO

GRADA DE RÍO

Lalo R. Villar - LFP

Flavio Perchman, agente del delantero, asegura que quiere seguir en España

29 jul 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

No se han cumplido las expectativas. Por ninguna de las dos partes. El entorno de Gabriel Toro Fernández habla claro de la temporada del ariete charrúa en Balaídos. Su representante, Flavio Perchman, no resta importancia a la falta de adaptación a un fútbol diferente como el español, pero advierte que no contó con las oportunidades para demostrar más. «Es consciente de que no logró el nivel ni la expectativa de cuando se llegó. Pero también es real que no le dieron las oportunidades para poder mostrarlo. Él es objetivo», apunta su representante.

La temporada del delantero de 26 años ha estado lejos del nivel goleador que mostró en su país. Enrolado en las filas de uno de los clubes más grandes del fútbol sudamericano, Peñarol, Gabriel Fernández cosechó 20 goles. En el Celta, solo aquel tanto de bella factura marcado al Valencia en la segunda jornada. Asimismo, Perchman cree que cuando mejor estaba el Toro llegó el covid. «En el momento que parecía encontrar el camino, que fue tras los partidos de Copa del Rey, se paró todo por la pandemia. Después se hace muy difícil acoplarse a un partido y a un equipo entrando cinco, siete u ocho minutos», explica.

Óscar García solo tuvo fe ciega en Iago Aspas, a quien otorgó los máximos minutos de la plantilla. A partir de ahí, fue rotando entre Santi Mina y Fedor Smolov para el puesto de acompañante del de Moaña. Para el Toro quedaron los minutos residuales de los instantes finales de partidos abocados al sufrimiento o al mero trámite. Flavio Perchman alude a una falta de confianza del técnico celeste en las cualidades del delantero. «Creo que mereció más oportunidades, pero es un tema subjetivo, de cómo cada uno ve el fútbol. Cada uno tendrá sus prioridades y evidentemente Gabriel no estuvo entre las prioridades del entrenador», continúa.

20 partidos y un total de 778 minutos a todas luces insuficientes para continuar otra temporada en Vigo. El Celta ya le ha dejado claro que se irá cedido, tal y como confirma su agente. «El Celta decidió cederlo para esta temporada, a partir de ahí veremos. Probablemente seguirá en el fútbol español y veremos si en otro lugar le dan el respaldo que este año, por razones compartidas, no lo pudo tener», dice.

Las primeras ofertas ya han llegado a oídos del representante de Gabriel Fernández, quien descarta —aunque no de manera tajante— una vuelta prematura a Peñarol, en el sitio donde es ídolo. «Las ofertas que estoy manejando son opciones de algún cuadro de Primera y algún cuadro de Segunda importante», incide mientras avisa que el club que quiera al Toro deberá poner de acuerdo el proyecto deportivo y la parte económica.

Sobre el interés del equipo aurinegro en repescar al delantero del Celta para la plantilla que entrena Diego Forlán, Perchman avisa que en el fútbol nunca se puede descartar nada pero que, ahora mismo, no trabajan en esa posibilidad. «Nunca descarto nada pero hoy no pasa por volver a Peñarol. Los hinchas lo quieren, es un lugar en el que está a gusto, pero él empezó una carrera europea», explica. El Toro Ferández ha puesto sus expectativas en continuar en el Viejo Continente y «demostrar que está capacitado para llegar a un fútbol como el español y triunfar».

El bagaje de su temporada ha sido escaso, con poca confianza y jugadores que le han ido cerrando las puertas de la titularidad y de los minutos. Tiene contrato hasta 2023 y el Celta plantea un futuro en el que cuente con las prestaciones que el futbolista uruguayo mostró en su país. Para eso, deberá rendir la próxima temporada lejos de Balaídos y demostrar que tiene hueco en plantillas posteriores. «Para hacer eso hay que quedarse en España», sentencia Perchman

Un solo gol en un año en los banquillos

Gabriel Fernández fue uno de los primeros fichajes del Celta para la temporada que acaba de finalizar. Se confirmó el 4 de julio de 2019, pero el Toro estaba firmado desde enero de ese mismo año. Los cantos de sirena que venía recibiendo Maxi Gómez hicieron que el Celta se apresurase a cerrar una incorporación similar en cualidades y cantidades.

De este modo se fichaba a otro delantero uruguayo por una cifra cercana a los 5 millones para aportar «envergadura» y «precisión de cara a puerta» tal y como rezaba el comunicado del club vigués anunciando su firma. Nada más lejos de la realidad. La llegada del delantero estuvo marcada por el proceso judicial que mantenía abierto en su país por el atropello de una joven que dejó en estado vegetativo y que, posteriormente, falleció. Por este juicio el Toro tuvo que viajar a Uruguay en un par de ocasiones, ausentándose de una pretemporada en la que le costó coger el ritmo. Solo disputó el último amistoso contra el Lugo.

A pesar de todo, comenzó la campaña como titular. Con Fran Escribá en el banquillo y frente al Real Madrid, el Toro jugó la práctica totalidad de un encuentro en el que se mostró bajo de ritmo pero batallador. En la siguiente jornada, la segunda, llegaría su primer y único gol con la zamarra celeste. Frente al Valencia y de tacón, Fernández dejó espacio para la esperanza en repetir la fórmula Maxi Gómez. Llegar y besar el santo.

Pero conforme fueron pasando las jornadas fue desapareciendo del césped. La última jornada con Escribá a los mandos jugó el primero de tres partidos completos con el Celta. Ese Celta-Getafe supuso el adiós del técnico valenciano y la montaña rusa de minutos del delantero charrúa. Solo volvería a disputar otros encuentros completos en Copa —frente a la Peña Azagresa y Mirandés—.

También las leves dolencias musculares que notó a lo largo de la campaña le frenaron el ritmo. Cuando más rodaje cogía, en pleno carrusel de partidos de Copa, unas molestias le dejaron fuera del encuentro en Mérida en el que también iba a ser titular.

Óscar García le dedicó a lo largo del año algún que otro guiño a su trabajo poco recompensado con minutos. «Está entrenando muy bien, se merece muchos más minutos (...). Sabe que cuento con él, me ha demostrado que puede ser útil para nosotros», comentó el entrenador el pasado enero. La pandemia y la llegada de Smolov acabaron con las opciones de entrar en una rotación de ataque que tampoco fue lo esperado en cuanto a goles.